Los hijos de Rub¨¦n Dar¨ªo
Los poetas latinoamericanos tienden en Salamanca un nuevo puente con Espa?a
Los poetas Gonzalo Rojas (Chile, 1917), ?lvaro Mutis (Colombia, 1923) Olga Orozco (Argentina, 1920), Emilio Adolfo Westphalen (Per¨², 1911) y Francisco Matos Paoli (Puerto Rico, 1915) coinciden estos d¨ªas en Madrid para participar a partir de hoy en la Semana de Poes¨ªa Iberoamericana, que se desarrollar¨¢ en la Universidad de Salamanca. En Madrid leyeron el viernes sus poemas en una velada en el Palacio Real, organizada por el Patrimonio Nacional. Son los hijos de Rub¨¦n Dar¨ªo y Vicente Huidobro, que buscan un nuevo puente con Espa?a.
Todos ellos son figuras ampliamente reconocidas de la literatura latinoamericana y el poder reunirlas ha dado pie a una confrontaci¨®n de opiniones sobre la relaci¨®n con Espa?a y entre las naciones hispanohablantes del continente americano.Es precisamente esta confrontaci¨®n amistosa lo que pretende el encuentro de Salamanca, afirman los organizadores de las jornadas. La posibilidad de reactualizar un puente que ahora parece disiparse. La idea de la Semana Latinoamericana es, entre otras cosas, debatir el estado actual de la poes¨ªa en pa¨ªses de Iberoam¨¦rica para acercar la realidad de su movimiento a Espa?a. Este objetivo obligar¨¢ a una reflexi¨®n sobre los lazos entre ambas experiencias ahora que parece tenderse nuevamente un puente.
Al encuentro asisten adem¨¢s otras generaciones de poetas, como son el caso de V¨ªctor Redondo, de Argentina; Pedro Shimose, de Bolivia; Carlos Contramaestre y Eugenio Montejo, de Venezuela, y forman parte del debate en las mesas redondas fil¨®logos como Alberto Madrid Letelier, Hilda Rojas, o catedr¨¢ticos como Julio V¨¦lez.
"Lo que se dice sobre el desconocimiento en Espa?a de la literatura latinoamericana es cierto y no es cierto", dice ?lvaro Mutis. "Por ejemplo, en Suram¨¦rica se hab¨ªa dejado un poco a la suerte y al azar la publicaci¨®n de la obra de Westphalen, y este a?o la vemos reunida en una edici¨®n completa de una importante editorial espa?ola. Yo puedo decir lo mismo con respecto a mi obra. S¨ª se hacen publicaciones de poes¨ªa latinoamericana. Y algunos cr¨ªticos espa?oles me han sorprendido por su conocimiento de la literatura latinoamericana. Lo que hay es un desconocimiento general del continente y de lo que somos, que me parece m¨¢s grave, como desconocimiento".
"Hay conocimiento de nombres aislados", a?ade Olga Orozco. "De poetas que han impresionado por una raz¨®n o por otra, pero no hay una visi¨®n de conjunto. De la Argentina, por ejemplo, se han publicado en Espa?a libros de Enrique Molina, m¨ªos, creo que de Alberto Girri, pero Molinari, que es un poeta que estuvo muy unido a la generaci¨®n del 27 es un poeta olvidado, cuando en Argentina tiene plena vigencia". "Y el mismo Girondo, de quien ser¨ªa urgente hacer una revisi¨®n", dice Mutis. "Y de Eguren y Mart¨ªn Ad¨¢n, y el conocimiento de C¨¦sar Moro es muy relativo", interviene Westphalen.
"Pero, ?por qu¨¦ este af¨¢n de que nos conozcamos y de que nos quieran y nos conozcan en Espa?a?", se pregunta Mutis. "La cultura no se hace as¨ª; hasta donde yo s¨¦, nace en ¨ªnsulas extra?as, justamente", en alusi¨®n a uno de los libros de Westphalen.
"Debe ser porque consider¨¢bamos que la publicaci¨®n en Espa?a significaba la entrada en Europa. Y mucha gente supone que una vez reconocido en Espa?a no demora mucho en ser traducido a otros idiomas". "Eso es un error completo", afirma Mutis. "?Qu¨¦ relaci¨®n ha habido entre Espa?a y Francia?" "En ocasiones se publican nuestras cosas-antes en Francia que en Espa?a", apunta Westphalen.
Aislamiento
"Yo pienso que los encuentros y los desencuentros son importantes. Yo he publicado en Espa?a mis libros, pag¨¢ndolos yo. El problema de Puerto Rico es, como dice Mutis, un problema de ¨ªnsulas extra?as. El aislamiento es casi total, no s¨®lo con Espafia, sino con Latinoam¨¦rica, e incluso con el Caribe, lo cual es ins¨®lito", se?ala Francisco Matos Paoli.Gonzalo Rojas quiso puntualizar: "No me quejo para nada como chileno de la comunicaci¨®n de la poes¨ªa de mi pa¨ªs con Espa?a. Ser¨ªa abusivo decir que Huidobro, Neruda y otros poetas no est¨¢n presentes aqu¨ª. Yo s¨ª creo que es v¨¢lido y estimulante dialogar. En 1958 me toc¨® poner en marcha unos ejercicios que se llamaron Imagen y realidad latinaomericana en Chile. Los encuentros y di¨¢logos fueron muy estimulantes para todos, no para llevar adelante ning¨²n proyecto socioecon¨®mico; pero esta experiencia previa al boom, que es el negocio de los editores, fue fresca y lozana. Cierto es que despu¨¦s he estado en muchos congresos muy aburridos". "Yo pienso que la poesia es una tarea esencialmente solitaria", a?ade Westphalen. "A m¨ª la isla me ha parecido siempre atractiva por lo misteriosa", dice Olga Orozco, pero, naturalmente, prefiero la comunicaci¨®n porque establece la posibilidad de un viaje en vivo".
Babelia
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