Esa compa?era de verano que nadie quiere
La 'diarrea del viajero' es el trastorno m¨¢s frecuente de las vacaciones
"Pas¨¦ tres d¨ªas muy molestos con diarrea, dolores de tripa y unas d¨¦cimas. Era una lata tener que estar a dieta de arroz hervido, zumo de lim¨®n y yogur, con las paellas y los pescaditos fritos que se toman en los chiringuitos de la playa", comenta Angel Tarazona, un ejecutivo de banca madrile?o que a causa de la diarrea perdi¨® tres d¨ªas de vacaciones de los 10 que disfrut¨® a primeros de este mes. El caso de este espa?ol de 37 a?os. es similar al de otras muchas personas durante los meses calurosos, ya que la diarrea es el trastorno m¨¢s frecuente del verano.
"Independientemente de la causa que la provoca, se la conoce como diarrea del viajero porque suele aparecer cuando cambiamos nuestros h¨¢bitos alimentarlos debido a las vacaciones, los fines de semana y otras salidas del entorno habitual en donde nos desenvolvemos", dice Manuel D¨ªaz Rubio, jefe del servicio de aparato digestivo del hospital Cl¨ªnico de Madrid y catedr¨¢tico de la Universidad Complutense. Seg¨²n este especialista, el agua (principalmente en los pa¨ªses tropicales y subdesarrollados) y los alimentos en mal estado son los dos grandes responsables de los procesos diarreicosEstos trastornos aparecen con frecuencia en personas que viajan a pa¨ªses subdesarrollados en donde no existen las adecuadas condiciones de salubridad. Sin embargo, es un error pensar que s¨®lo se presenta en estas regiones. Tambi¨¦n es frecuente en pa¨ªses desarrollados del Mediterr¨¢neo, como Espa?a, Italia y Francia.Con las altas temperatura estivales los alimentos se degradan, multiplic¨¢ndose las posibilidades de que se contaminen con bacterias capaces de producir cuadros diarreicos / "La mayor¨ªa de los procesos diarreicos son de car¨¢cter leve o moderado", advierte D¨ªaz Rubio, "y no suelen requerir ingreso hospitalario. Producen frecuentes deposiciones acuosas con la consiguiente p¨¦rdida de l¨ªquidos y electr¨®litos. Pueden ir acompa?ados de dolores abdominales y a veces de fiebre".
Ancianos
Para Joaqu¨ªn Potel, presidente de la Sociedad Espa?ola de Patolog¨ªa Digestiva, la severidad de la diarrea depende en gran parte de la,cantidad de alimento contaminado que se ingiera y del estado en que se encuentre el sistema inmunol¨®gico o defensivo de la persona. Seg¨²n Potel, los ni?os de corta edad, los ancianos y las personas con enfermedades cr¨®nicas son m¨¢s vulnerables a este trastorno.
La primera medida que hay que adoptar ante la aparici¨®n de una diarrea es evitar la deshidrataci¨®n. Lo m¨¢s aconsejable es la limonada alcalina, que consiste en preparar un litro de agua fr¨ªa (previamente hervida) con el zumo de un lim¨®n, dos cucharaditas de az¨²car y un pellizco de sal y otro de bicarbonato. Conviene tambi¨¦n seguir una dieta astringente cl¨¢sica (arroz hervido, yogur natural).Si la diarrea va acompa?ada de fiebre, es conveniente solicitar la ayuda del m¨¦dico, quien prescribir¨¢ alg¨²n medicamento antidiarreico y tal vez antibi¨®ticos. No se debe subestimar este proceso, sobre todo si nos encontramos en un pa¨ªs subdesarrollado, ya que puede convertirse en. un cuadro grave.
"El verano pasado, en un viaje a la India, estuve con diarrea y fiebre durante dos d¨ªas y al tercero me llevaron a un hospital, donde permanec¨ª una semana, me rehidrataron con suero y me pusieron bastantes antibi¨®ticos", relata Ra¨²l Est¨¦vez, un joven universitario de Madrid, que no duda en atribuir su mal a unos pinchos que comi¨® en los puestos ambulantes de las calles de Calcuta.
"En los pa¨ªses subdesarrollados", indica Luis Rodrigo, jefe de aparato digestivo del hospital Nuestra Se?ora de Covadonga de Oviedo, las precauciones higi¨¦nico-sanitarias deben extremarse. Se da la circunstancia de que muchos de los microorganismos que para los abor¨ªgenes del pa¨ªs no son pat¨®gienos o nocivos porque los individuos tienen las defensas adecuadas contra ellos, sin embargo, para nosotros s¨ª pueden serlo, al no tener nuestras defensas habituadas a hacerles frente".
Conforme se?ala el especialista de Oviedo, los cubitos de hielo son una importante v¨ªa de transmisi¨®n, que generalmente no es muy tenida en cuenta. "De nada sirve", agrega, "que evitemos en esos pa¨ªses tomar agua y otros l¨ªquidos no embotellados, cuando podemos beber un refresco con cubitos elaborados con agua del grifo. Otro tanto ocurre con el caf¨¦, el t¨¦ y dem¨¢s infusiones que se preparan con agua".
Riesgos del marisco sin depurar
., No es condici¨®n sine qua non viajar a un pa¨ªs lejano o tener que salir de casa para contraer una diarrea caracter¨ªstica de los meses de verano. En nuestro propio hogar, si no tomamos las necesarias precauciones, es posible tomar alimentos contaminados.
Manuel D¨ªaz Rubio, jefe de aparato digestivo del Cl¨ªnico de Madrid, asegura que la actitud de cada persona es fundamental para prevenir esta alteraci¨®n gastrointestinal: "No sirve de nada adquirir en buenas condiciones carnes o pescados crudos, salsas mayonesas y pasteles o tartas, si a la hora de prepararlos y consumirlos en casa rompemos la cadena del fr¨ªo y hacemos que se contaminen".
Para el responsable del mismo servicio m¨¦dico en el hospital Nuestra Se?ora de Covadonga de Oviedo, Luis Rodrigo, , todos los alimentos que contengan entre sus ingredientes huevos tienen un riesgo importante de contaminarse y producir cuadros diarreicos serios, como la salmonelosis.
"La mayonesa y otras salsas", explica, "as¨ª como los productos de reposter¨ªa deben mantenerse en el frigor¨ªfico y tratar de que permanezcan el menor tiempo posible a temperatura ambiente. Los calores del verano convierten al huevo, ingrediente de estos productos, en un magn¨ªfico caldo de cultivo de miles de bacterias pat¨®genas".
El consumo de carnes, pescados y mariscos crudos ofrece tambi¨¦n un riesgo que no debe ser descuidado. Caso omiso de esta advertencia hizo Gracia Larrea, una estudiante de 20 a?os de la Universidad de Santiago de Compostela. "Com¨ª ostras sin depurar", dice, "porque ten¨ªa entendido que as¨ª lo aconsejaban algunos gastr¨®nomos para degustar verdaderamente este molusco, y contraje una infecci¨®n gastrointestinal que estuvo a punto de costarme la vida".
Seg¨²n afirma Joaqu¨ªn Potel, presidente de la Sociedad Espa?ola de Patolog¨ªa Digestiva y catedr¨¢tico de la Universidad de Santiago, "en Galicia es muy frecuente encontrar alteraciones diarreicas serias por comer marisco sin que haya pasado por los procesos de las industrias depuradoras. Los m¨¦dicos estamos cansados de advertirlo a la poblaci¨®n".
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