El PCE adopta una actitud de recelo ante la evoluci¨®n de la 'perestroika'
El PCE recela de la evoluci¨®n de la perestroika (reforma) en la URSS. El proyecto de Manifiesto, que se debatir¨¢ en diciembre, advierte que "no est¨¢ claro ya que ¨¦sa vaya a ser una v¨ªa para la regeneraci¨®n socialista en la URSS". En cambio, se reconoce que la perestroika puso fin a la "ilusi¨®n ideol¨®gica" de llamar socialismo a "un proceso de industrializaci¨®n acelerado, dur¨ªsimo control de las poblaciones y tendencia a la igualaci¨®n social en la escasez".
Los documentos aprobados por el comit¨¦ central el pasado d¨ªa 27 de julio y que ser¨¢n discutidos en el XIII Congreso del PCE, que se celebra a mediados del pr¨®ximo mes de diciembre, contienen en varios casos apreciaciones diferentes sobre un mismo asunto. Son matizaciones en las que se percibe un esfuerzo por evitar contradicciones pero que muestran sensibilidades pol¨ªticas diferentes, como lo son las de los dirigentes que han pactado la redacci¨®n de los textos. Entre esos dirigentes figuran los principales responsables del PCE, como Julio Anguita y, Francisco Frutos, y miembros destacados del extinto y prosovi¨¦tico PCPE, como Manuel Monereo y Luis Cabo.La introducci¨®n al Manifiesto parte de la perspectiva de que los cambios iniciados por Mija¨ªl Gorbachov en 1986 apuntaban a una regeneraci¨®n del socialismo. La mayor¨ªa del comit¨¦ central del PCE considera ahora, seg¨²n el citado documento, que la desconfianza de buena parte de la poblaci¨®n sovi¨¦tica, las a?oranzas de minor¨ªas privilegiadas y "el transformismo de no pocos dirigentes han convertido la inicial perestroika en un proceso actualmente confuso que suscita tantas preocupaciones como entusiasmos suscit¨® en un principio".
Efectos negativos
La confusi¨®n estriba, seg¨²n su perspectiva, en que no est¨¢ claro que la perestroika vaya a ser un instrumento de regeneraci¨®n socialista en la URSS mientras que son muy patentes los efectos negativos que en el plano internacional esta" teniendo la gran crisis que hoy se vive en los pa¨ªses de la Europa oriental".Una alusi¨®n que sugiere cierta nostalgia del poder¨ªo econ¨®mico pero tambi¨¦n militar sovi¨¦tico, ya que poco despu¨¦s se indica, incluso con cierto reproche, que pa¨ªses anticapitalistas y movimientos de liberaci¨®n de Asia, ?frica y Am¨¦rica "han perdido el apoyo que encontraron en la URSS en otros tiempos".
Tras este tipo de reflexiones, el documento sostienen m¨¢s adelante un requerimiento a pa¨ªses como China y Cuba para que afronten un proceso de democratizaci¨®n, respeten la libertad y supriman la pena de muerte,
La mayor¨ªa del comit¨¦ central del PCE -los documentos fueron aprobados por 33 votos a favor y 13 en contra, con la inasistencia a la reuni¨®n de unos 50 dirigentes- considera que la persistencia de la desigualdad social da actualidad al ideario comunista, "al comunismo como horizonte". Una perspectiva que contrasta, al menos en la terminolog¨ªa, con la que luego se perfila para Izquierda Unida, que es la del socialismo democratico.
En la b¨²squeda del equilibrio entre los ac¨¦rrimos defensores de la pervivencia del PCE y la dedicaci¨®n creciente a IU, el Manifiesto caricaturiza la idea de la eterna existencia [del PCE] en funci¨®n de no se sabe qu¨¦ ley sobrenatural", aunque afirma el papel "necesario" de los comunistas. El dise?o de la labor de las agrupaciones sit¨²a en primer lugar el objetivo de aumentar la implantaci¨®n territorial y pol¨ªtica de IU, sin olvidar citar, en ¨²ltimo lugar, el reforzamiento y crecimiento del PCE. Este partido advierte que ejercer¨¢ su derecho a defender su propia concepci¨®n de las transformaciones sociales que IU promueve.
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