El Papa clama en Czestochowa por la Unidad cristiana europea ante un mill¨®n de peregrinos

El Papa lleg¨® ayer por la tarde a Czestochowa, el principal santuario cat¨®lico de Polonia, para celebrar, junto con m¨¢s de un mill¨®n de peregrinos venidos de 80 pa¨ªses del mundo, el VI D¨ªa Mundial de la Juventud. La gran novedad de este acontecimiento religioso -cuyas anteriores ediciones se celebraron en Roma, Buenos Aires y Santiago de Compostela- es la afluencia de decenas de miles de penitentes de la URSS. Seg¨²n fuentes eclesi¨¢sticas, se esperaba la llegada a Czestochowa de unos 100.000 j¨®venes peregrinos de la Europa del Este. En el saludo a la multitud, Juan Pablo II llam¨® a eliminar la divisi¨®n de Europa, que "durante d¨¦cadas se mantuvo por la fuerza"."Es necesario", manifest¨® el Pont¨ªfice, que "Europa, para el bien de toda la familia humana, busque en el futuro la unidad, volviendo a sus ra¨ªces cristianas". Estas ra¨ªces existen en Occidente, subray¨® Juan Pablo II recordando Santiago de Compostela, y tambi¨¦n en el Este de Europa.

Acto seguido el Papa salud¨® a los j¨®venes en 18 idiomas, entre ellos casi todas las lenguas del Este de Europa: ruso, lituano, bielorruso, ucranio, checo, eslovaco, esloveno, croata y b¨²lgaro.

"Que el Esp¨ªritu Santo os acompa?e en vuestro viaje desde la esclavitud hacia la libertad de los hijos de Dios", manifest¨® el Papa a los peregrinos de la Uni¨®n Sovi¨¦tica.

A los croatas, el Papa les dese¨® que la Virgen de Czestochowa les ayude en su viaje hacia el futuro, y a los eslovenos, otro de los pueblos de la agonizante Yugoslavia, que les conduzca hacia la libertad, legalidad, solidaridad y santidad.

15.000 espa?oles

Por la noche, el papa Juan Pablo II comparti¨® la velada con m¨¢s de un mill¨®n de fieles, y volvi¨® a acusar a la civilizaci¨®n moderna de contribuir a eliminar de la conciencia del hombre la existencia de Dios. "Velad y orad para que no caig¨¢is en la tentaci¨®n", record¨® a los j¨®venes, a los que pidi¨® que no confundan el bien con el mal.En la ciudad de Czestochowa, a 200 kil¨®metros al sur de Varsovia, donde se encuentra el monte de Jasna Gora, coronado por el monasterio en el que se alberga el icono de la Virgen Negra (patrona de Polonia), se congregaron cerca de 1,1 millones de peregrinos, entre ellos casi 15.000 j¨®venes espa?oles.

Aunque los organizadores reconocieron que los grupos latinos eran los que creaban un ambiente inolvidable en la ciudad, los aut¨¦nticos protagonistas del VI D¨ªa Mundial de la Juventud son los peregrinos de la URSS, cuyo n¨²mero puede rondar los 80.000.

?stos pudieron por primera vez acudir libremente a los actos religiosos celebrados con tanta frecuencia en la vecina Polonia. En el pasado mes de julio, la Embajada polaca en Mosc¨² estaba literalmente sitiada por los ciudadanos sovi¨¦ticos deseosos de viajar a Czestochowa. El primer tren especial parti¨® de la capital sovi¨¦tica el 1 de agosto.

Este verano el aluvi¨®n de turistas sovi¨¦ticos, que se dedican principalmente a vender en Polonia todo lo que todav¨ªa pueden conseguir en su mercado interno, provoc¨® colas gigantescas en los pasos fronterizos entre la URSS y Polonia. La oleada de peregrinos no hizo m¨¢s que agravar esta situaci¨®n. Las autoridades polacas decidieron incluso destinar algunos de los puestos fronterizos s¨®lo a los peregrinos, dado que en ciertos casos las colas de veh¨ªculos que aguardaban la entrada, en Polonia ten¨ªan hasta ocho kil¨®metros.

Los peregrinos sovi¨¦ticos pernoctan en Czestochowa en campamentos improvisados especialmente para esta ocasi¨®n. Su situaci¨®n econ¨®mica -s¨®lo se les ha permitido sacar del pa¨ªs el equivalente de unos cuatro d¨®lares- hizo que varios de ellos decidieran remendar sus presupuestos comerciando en Czestochowa. No es nada raro ver a grupos enteros de ciudadanos de la URSS que, aparte de mochilas y maletas, cargan con bicicletas infantiles.