Defensa admite que hay casos de enchufismo en la concesi¨®n de destinos en la 'mili'
El director general del Servicio Militar, Laureano Garc¨ªa, admiti¨® ayer, en un debate a puerta cerrada con miembros de las Juventudes Socialistas, que existen casos de arbitrariedad y favoritismo en la concesi¨®n de destinos en el servicio militar, y se mostr¨® partidario de mejorar los mecanismos de control para erradicar estas pr¨¢cticas. En respuesta a la pregunta de un joven que cit¨® casos de enchufismo entre hijos de militares, Garc¨ªa se?al¨® que el nuevo sistema de adjudicaci¨®n de destinos permitir¨¢ reducir al m¨¢ximo estos supuestos.
Entre las ideas que se barajan, aunque sin concreci¨®n todav¨ªa, cit¨® la posible sustituci¨®n de la tradicional cartilla militar por una tarjeta con banda magn¨¦tica, similar a las de cr¨¦dito. Una regulaci¨®n m¨¢s rigurosa, un control m¨¢s exhaustivo y una mayor informaci¨®n a los j¨®venes en torno a sus propios derechos y a los, medios para hacerlos efectivos, fueron las medidas esbozadas por Garc¨ªa para hacer frente a, problemas como arrestos arbitrarios o novatadas, que le fueron suscitados por su auditorio y, cuya existencia reconoci¨®, aunque con car¨¢cter aislado.La conferencia, de las Juventudes Socialistas sobre el futuro del servicio militar, que se clausura hoy en Madrid, fue inaugurada ayer por el ministro de Defensa, Juli¨¢n Garc¨ªa Vargas, quien, como ya hizo hace algunos meses en el Senado, volvi¨® a criticar el mal funcionamiento de la prestaci¨®n social de los objetores. "En ocasiones se dice que en nuestra legislaci¨®n est¨¢ penalizada la objeci¨®n, cuando ocurre exactamente lo contrario. En la pr¨¢ctica, lo que est¨¢ penalizado es el servicio militar", dijo.
Como ejemplo, se?al¨® que "los incendios los apagan los soldados y no los objetores", a pesar de que la Ley de Objeci¨®n de Conciencia "menciona expresamente la protecci¨®n de la naturaleza" entre las misiones de la prestaci¨®n sustitutoria. "Espero que el pr¨®ximo verano se corrija esta situaci¨®n", concluy¨®.
En su intervenci¨®n, el ministro adelant¨® que algunos de los puntos m¨¢s controvertidos del documento de las Juventudes Socialistas que se debate en la conferencia son dif¨ªcilmente asumibles por el Gobierno. Se refiri¨® en concreto a la reducci¨®n de la mili a seis meses, el cumplimiento a plazos del servicio militar, la gesti¨®n de las pr¨®rrogas por los ayuntamientos o el reconocimiento de la objeci¨®n sobrevenida. En cambio, se mostr¨® dispuesto a estudiar y, en alg¨²n caso, asumir otros aspectos del documento.
Adelantar la reducci¨®n
El ministro aprovech¨® su intervenci¨®n para anunciar que su departamento se propone adelantar en dos o tres a?os, a 1997 o 1998, la reducci¨®n de efectivos de las Fuerzas Armadas aprobada por el Parlamento antes del verano y prevista en principio para el a?o 2000. Los miembros totales de las Fuerzas Armadas oscilar¨¢n entre 170.000 y 180.000, lo que supone una reducci¨®n del 35% sobre su actual volumen, de casi 270.000.Seg¨²n los datos adelantados por el secretario de Estado de la Administraci¨®n Militar, Gustavo Su¨¢rez Pertierra, en la Revista Espa?ola de Defensa, ¨®rgano oficial del ministerio, la mayor reducci¨®n se producir¨¢ en el n¨²mero de soldados de recluta obligatoria, que pasar¨¢ de 190.000 a s¨®lo 85.000.
En cuanto a los cuadros de mando, el colectivo m¨¢s dif¨ªcil de alterar, la reducci¨®n ser¨¢ de s¨®lo 5.000 hombres, pasando de 56.000 a 51.000. Las Fuerzas Armadas deber¨¢n cerrar tambi¨¦n numerosas unidades, ya que, seg¨²n Su¨¢rez Pertierra, actualmente existe "un desmesurado n¨²mero de centros, acuartelamientos e instalaciones".
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