Callejeros

Durante nueve a?os, Barricada ha vendido m¨¢s de medio mill¨®n de ejemplares de sus ocho discos (50.000 en 15 d¨ªas de su ¨²ltimo trabajo, Por instinto), defendiendo un rock duro con una tem¨¢tica de enfrentamiento radical al sistema. Algo de veracidad deben desprender, porque su p¨²blico est¨¢ muy currado y no se gasta 1.400 pesetas para escuchar mentiras.Cuando en 1985 el grupo de Pamplona titul¨® a su segundo disco Barrio conflictivo, eligi¨® bien su audiencia: el extrarradio urbano. Un a?o m¨¢s tarde, volvi¨® a acertar con el siguiente trabajo: No hay tregua. Era la lucha continua de los no asimilados por mantener su identidad, que encontraban en las canciones de Barricada su expresi¨®n id¨®nea: "Ninguna bandera me pone la carne de gallina. / Ninguna bandera me pone de pie" (Por instinto. 1991).

El cauce elegido por Barricada para hacer que sus textos caminen solos ha sido el m¨¢s simple: un rock de gran energ¨ªa, escueta instrumentaci¨®n (dos guitarras, bajo y bater¨ªa), y r¨ªtmicamente trepidante. La experiencia del cuarteto en el escenario (Barricada no conoce la crisisecon¨®mica que atraviesa la m¨²sica porque tiene una audiencia fiel), garantiza la conjunci¨®n, un trabajo sencillo y bien ejecutado y, por lo tanto, el acceso directo a un p¨²blico que no pide m¨¢s.

Su recital en Madrid fue significativo al respecto, aunque present¨® algunos desajustes en la interpretaci¨®n de canciones de su ¨²ltimo disco (?frica), mezclados con otros temas nuevos en los que la compenetraci¨®n fue perfecta y original en las guitarras (Haz lo que quieras).

Fueron dos horas en las que las canciones de Barricada cayeron como una maza sobre un p¨²blico cercano a la catarsis y ajeno a la monoton¨ªa musical del cuarteto. Composiciones cortadas por un mismo patr¨®n, con desarrollos arm¨®nicamente muy simples que desembocan en estribillos coreados con frenes¨ª y adornados por la competente guitarra de Alfredo Piedrafita. El rock en su estado m¨¢s elemental.

En este terreno, Barricada se mueve como pez en el agua y tiene buen cuidado en no traspasar los l¨ªmites que tan buenos resultados le proporciona, aunque en sus ¨²ltimos trabajos la tem¨¢tica social tiene un contrapeso mayor en las at¨ªpicas canciones de amor, desde el ¨¦xito de No se que hacer contigo (1987). Pero su p¨²blico no olvida y enloqueci¨® con Okupa, Campo amargo y tantos otros temas que han convertido a Barricada, con m¨¢s suerte que Rosendo y Burning, en el grupo m¨¢s callejero.