Manuel S¨¦rgio, diputado posmoderno
El creador del 'partido de los jubilados' entra en el Parlamento portugu¨¦s
"Los humillados y ofendidos, los jubilados, las mujeres, los j¨®venes, las peque?as y medianas empresas, los pescadores, los agricultores, los expoliados de ultramar" ya tienen una voz que les represente en la Asamblea de la Rep¨²blica de Portugal. Ser¨¢ la de Manuel Sergio, de 58 a?os, presidente del Partido de la Solidaridad Nacional (PSN), que ha resultado ser la mayor sorpresa de las elecciones del pasado domingo, al obtener un esca?o en el Parlamento para el denominado partido de los jubilados, refrendado por casi 100.000 votos s¨®lo tres meses despu¨¦s de su fundaci¨®n.Este profesor de epistemolog¨ªa ha conseguido sobrevivir al aluvi¨®n de votos cosechado en Portugal por el primer ministro, An¨ªbal Cavaco Silva, a base de discursos en los que predicaba "la solidaridad, el amor y la amistad" a peque?os grupos de "olvidados de la mano del dios consumista", e intercalando en su campana en plazas y mercados citas de Lyotard, Vattimo o Habermas, los "pensadores de la posmodernidad", que son su referente filos¨®fico. La experiencia no pod¨ªa ser m¨¢s curiosa. No en vano el lema de este ex obrero autodidacto, que pas¨® fugazmente por el seminario, es: "En la vida no hay fines, hay comienzos".
Su vida parece responder a la perfecci¨®n a esa m¨¢xima e ilustra la trayectoria de hombre hecho a s¨ª mismo que se esconde detr¨¢s de su aspecto de ciudadano bien pensante y pac¨ªfico. El l¨ªder del PSN form¨® parte de una generaci¨®n de trabajadores que combin¨® la f¨¢brica y la escuela. A principios de los sesenta comenz¨® a estudiar filosof¨ªa en la Universidad Cl¨¢sica de Lisboa, se vincul¨® a medios cat¨®licos y colabor¨® en publicaciones deportivas.
Por ese camino se relacion¨® con directivos del deporte portugu¨¦s y posteriormente se doctor¨® por la Universidad T¨¦cnica de Lisboa con una tesis en la que defend¨ªa la transformaci¨®n de la educaci¨®n fisica en ciencia de la motricidad humana. La publicaci¨®n de varios libros sobre esa disciplina ha hecho que S¨¦rgio se considere "el primer fil¨®sofo del deporte en Portugal". Entre el deporte y la filosof¨ªa, el nuevo parlamentario no ignor¨® la poes¨ªa, y ha publicado ya tres vol¨²menes.
Despu¨¦s de conocer su victoria electoral, dijo que era "el triunfo de la solidaridad" y reiter¨® que el suyo era diferente a los viejos partidos y no se limitaba a su actual desarrollo: "Tenemos que pensar que el PSN no es el partido de los viejecitos, es un partido capaz de traer una nueva manera de ver la pol¨ªtica en Portugal. No es ninguna brigada de reum¨¢ticos, como muchos han dicho", subray¨®.
El PSN tiene, seg¨²n sus organizadores, 20.000 afiliados y su antecedente es el movimiento de los jubilados creado hace cinco a?os por Jo?o Francisco de Oliveira, que ahora culmina "una lucha como la de Don Quijote en el desierto".
M¨¢s all¨¢ de iron¨ªas y recelos -S¨¦rgio fue definido tambi¨¦n como un oportunista con buen coraz¨®n-, el nuevo diputado, que tuvo una vinculaci¨®n fugaz con los socialdem¨®cratas y con los comunistas a mediados de los setenta, persigue con m¨¢s ¨¦nfasis el crecimiento de su partido. Y seguir¨¢ siendo, como hasta ahora, dirigente de su club: Os Belenenses.
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