Un nuevo reto para las fuerzas de seguridad de Madrid

La confirmaci¨®n de Madrid como sede de la Conferencia de Paz para Oriente Pr¨®ximo rest¨® horas de sue?o al ministro de Asuntos Exteriores, Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®nez, embargado por la satisfacci¨®n. A partir de ahora, los que no van a pegar ojo son los responsables de la Seguridad del Estado, a quienes la resoluci¨®n ha pillado por sorpresa.En el Ministerio del Interior se trabaja a marchas forzadas para garantizar la seguridad de la cumbre, pero todo el operativo no quedar¨¢ perfilado hasta la pr¨®xima semana. "Tenemos suficiente experiencia en reuniones de alto nivel", afirm¨® un portavoz. La ¨²ltima acci¨®n de la banda terrorista ETA, que el jueves sembr¨® de sangre las calles de la capital, no ha disuadido a los protagonistas de la conferencia para elegir a Madrid como sede.

Nunca antes la capital se hab¨ªa visto inmersa en un acontecimiento de tal envergadura. El antecedente m¨¢s pr¨®ximo se remonta al 9 de septiembre de 1980, d¨ªa en que se Inaugur¨® en el Palacio de Exposiciones y Congresos la tercera etapa de Conferencia sobre Seguridad y Cooperaci¨®n en Europa (CSCE). Entonces, la candidatura de Madrid se plante¨® tres a?os antes de la celebraci¨®n de la cumbre, y los preparativos se realizaron con un a?o de antelaci¨®n.

En esta ocasi¨®n, el lugar de la conferencia es una inc¨®gnita. Fuentes de Exteriores daban ayer como seguro el Palacio de Exposiciones y Congresos, si bien este extremo no ha sido confirmado por Interior.

Fuentes pr¨®ximas a la Seguridad del Estado conjeturaban ayer con la posibilidad de que la conferencia se celebre fuera de la capital, en la provincia de Madrid, de manera que se pudiera ejercer un mayor control sobre el movimiento de todos los participantes. En medios parlamentarios se hablaba tambi¨¦n del uso del nuevo edificio del Senado. Sin embargo, Exteriores, que espera la llegada de unas 7.000 personas, afirma que el ¨²nico lugar con una infraestructura adecuada es el Palacio de Congresos.

Hasta ahora, la principal preocupaci¨®n de las autoridades madrile?as era la capitalidad europea de la cultura. Ahora se encuentran, de sopet¨®n, con un acontecimiento que situar¨¢ el nombre de la ciudad en los titulares de los peri¨®dicos de todo el mundo.