La felicidad sin guitarra

Hablar con Paco de Luc¨ªa es descubrir, a un artista transparente, capaz de reflejar sus estados de ¨¢nimo y de recordar entrevistas anteriores en las que el pesimismo y el cansancio eran patentes. "Hay d¨ªas en los que uno se hunde. T¨² sabes la ansiedad, el desasosiego y la angustia que produce la creaci¨®n, y a veces piensas que no sabes fiada, que no sabes tocar, que no merece la pena. De pronto te pilla una entrevista y reflejas eso. La ¨²ltima me cogi¨® muy cansado porque llegaba de vacaciones, estaba feliz y me encontr¨¦ con que ten¨ªa que empezar a ofrecer un concierto diferente con dos chavales j¨®venes [Ca?izares y Bandera]. Me produc¨ªa mucha inseguridad, miedo y pereza. Soy feliz de verdad cuando dejo mi guitarra en Madrid y me escapo. Es cuando encuentro la serenidad y la tranquilidad".

Alejamiento

Resulta parad¨®jico que nuestro guitarrista flamenco m¨¢s reconocido busque la felicidad en el aleIjamiento de la guitarra. "Llevaba a?os en los que no ten¨ªa sentido trabajar y trabajar con esa ansiedad continua que me estaba quemando", confiesa. "Un d¨ªa me di cuenta de que lo que me gustaba era jugar al f¨²tbol y pescar, y eleg¨ª dos o tres meses al a?o para retirarme sin guitarra a una playa solitaria. Y ahora, cuando estoy cansado, pienso: 'Bueno, dentro de poco voy a ir a esa playay me pondr¨¦ a pescar'. Es como una esperanza, como una ilusi¨®n. Y hay que crearse una ilusi¨®n para que el trabajo se haga menos pesado".

Y Paco de Luc¨ªa juega al f¨²tbol dos o tres veces por semana con sus amigos, mientras espera su retiro anual en Canc¨²n, (M¨¦xico). "A m¨ª me gusta tocar m¨¢s que nada, pero no me gusta la responsabilidad. Eso de tener ya un nivel que hay que mantener y, si es posible, superar, llega un momento en que te revienta. No hay cuerpo que lo aguante, gobre todo siendo un neur¨®tico como yo, tanto tiempo solo y con el egocentrismo t¨ªpico de los especialistas. Si me escapo de la guitarra, es para volver a ella con m¨¢s gusto".