Los deportistas espa?oles son insensibles al problema del sida, seg¨²n un estudio del INEF
La mayor¨ªa de deportistas espa?oles de elite son promiscuos e insensibles al problema del sida seg¨²n un estudio realizado por el profesor del Instituto de Educaci¨®n F¨ªsica de Valencia, Salvador Barber¨¢, titulado Sida y deporte. Barber¨¢ inici¨® su trabajo hace dos a?os y lo complet¨® hace unas semanas. Sus investigaciones se basan en los cuestionarlos que cumplimentaron 482 deportistas, de entre 20 y 29 a?os, de ambos sexos y que compiten en las m¨¢ximas categor¨ªas del f¨²tbol, balonmano, baloncesto y rugby y son profesionales o internacionales del taekwondo, boxeo, atletismo y ciclismo.
Barber¨¢, de 49 a?os, que tambi¨¦n es psic¨®logo y miembro de la Federaci¨®n Internacional de Medicina Deportiva, manifiesta que, en las conversaciones que mantuvo con numerosos deportistas, "me llam¨® la atenci¨®n su indiferencia hacia el problema del sida y el gran n¨²mero de ellos que confes¨® no tomar habitualmente ning¨²n tipo de precauci¨®n al respecto".En los cuestionarios en los que se basa la investigaci¨®n, 410 de los encuestados, un 85%, dice creer que los deportistas de elite son promiscuos, un 60% dice no haber recibido la informaci¨®n suficiente sobre el sida, un 65% no cree que donde se entrenan pueda existir el virus, un 85% no cree tener ning¨²n compa?ero portador del virus y un 70% admite que un portador pueda practicar deporte con normalidad.
"Los resultados que he obtenido en esta investigaci¨®n son alarmantes", indica Barber¨¢. "La desinformaci¨®n es absoluta respecto a la transmisi¨®n v¨ªrica de la enfermedad y las medidas precautorias, nulas". Todo ello conduce a que los deportistas incurran en actitudes de riesgo que, "potencialmente, hacen que en el deporte se puedan dar much¨ªsimos casos de sida y que incluso pudiese figurar entre los grupos de alto riesgo".
Costumbres peligrosas
Barber¨¢ relata toda una serie de costumbres peligrosas entre los deportistas. "Por ejemplo, los ciclistas se depilan las piernas para recibir masaje y, muchos de ellos, confiesan que, a veces, lo hacen con cuchillas de afeitar que se prestan entre ellos. Muchos deportistas se inyectan complejos vitam¨ªnicos ellos mismos y tambi¨¦n se pasan de uno a otro las jeringuillas que utilizan para ello. Por no hablar del boxeo, un deporte en el que el contacto con la sangre es continuo. Hace cierto tiempo los ¨¢rbitros y los cuidadores de los boxeadores llevaban guantes de goma, ¨²ltimamente, ni tan siquiera se toma esa precauci¨®n".Otras pr¨¢cticas que destaca Barber¨¢ como potencialmente peligrosas para la transmisi¨®n de la enfermedad, son "que los jugadores de rugby utilicen el mismo cubo de agua para quitarse el sudor y en muchas ocasiones la sangre de las heridas que reciben a lo largo de un partido. Es tambi¨¦n de dominio p¨²blico que algunos deportistas intentan mejorar su rendimiento haci¨¦ndose transfusiones de sangre, a veces ajena y, a veces a trav¨¦s de procedimientos sin las garant¨ªas m¨¦dicas imprescindibles".
En el trabajo se ha tenido en cuenta la opini¨®n de un grupo de encargados de mantener instalaciones deportivas. Son personas, seg¨²n el profesor valenciano, que deben estar especialmente sensibilizadas con el tema puesto que la limpieza de los vestuarios y de las instalaciones deportivas en general tambi¨¦n es importante para evitar la transmisi¨®n de la enfermedad. "Tambi¨¦n es descorazonador que la mayor¨ªa de ellos no sepan que el mejor ant¨ªdoto contra la transmisi¨®n del virus a trav¨¦s de una mancha o un charco de sangre es algo tan simple como la lej¨ªa. Es muy frecuente que un deportista se duche, tras haber competido, con una herida abierta lo cual hace que sus compa?eros -la mayor¨ªa circula por las duchas y los vestuarios sin ning¨²n tipo de calzado- puedan entrar en contacto con el virus".
La valoraci¨®n, a trav¨¦s del m¨¦todo estad¨ªstico, dio c¨®mo resultado diferencias no significativas entre los grupos analizados, es decir entre hombres y mujeres o entre aquellos que tienen determinada edad o practican determinado deporte. Otro dato desesperanzador es que Barber¨¢, una vez concluido su trabajo, convers¨® con los deportistas que le ayudaron en la investigaci¨®n y pudo saber que "ni uno solo de entre ellos hab¨ªa hablado al respecto ni con su entrenador ni con su m¨¦dico".
Actitud de riesgo
La conclusi¨®n principal del trabajo, que tiene una extensi¨®n de 150 folios, es que "debido a la poca sensibilidad, falta de informaci¨®n y dejadez existente en la pr¨¢ctica deportiva se est¨¦n llevando a cabo actitudes de riesgo que son las que hay que eliminar puesto que, hoy por hoy, el sida no se puede combatir de otra forma que respetando las normas preventivas". Otra de las conclusiones es que pr¨¢cticamente ninguno de los deportistas encuestados hab¨ªa pasado el an¨¢lisis del virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), causante del sida.Barber¨¢ elogia la actitud de Magic Johnson al anunciar que es portador del virus del sida. "Ha sido muy honesto porque sabe que, en una pista de baloncesto, puede constituir un serio peligro para los dem¨¢s".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.