Olvidar Pearl Harbor

William Finn, que manejaba hace 50 a?os una pieza de artiller¨ªa en la base naval de Kanehone, se dispon¨ªa ayer a tomar un avi¨®n de regreso a su hogar en Nueva Jersey despu¨¦s de haber vivido lo que ¨¦l llam¨® la ¨²ltima gran emoci¨®n de su vida. "Seguramente nunca regresar¨¦ a Honolulu. Tal vez ninguno de los que hemos estado aqu¨ª regresaremos. Me queda la impresi¨®n de que despu¨¦s de una vida entera dedicada a recordar Pearl Harbor, ha llegado ya la hora de olvidar Pearl Harbor".

El presidente George Bush ha querido convertir este 50? aniversario en el a?o del perd¨®n y el olvido. Desde el solemne monumento al barco Arizona entre cuyos hierros reposan todav¨ªa los restos de 954 marineros que se hundieron con ¨¦l Bush hizo el s¨¢bado un llamamiento a la definitiva reconciliaci¨®n con Jap¨®n, un pa¨ªs fundamental en el nuevo orden internacional que la Casa Blanca defiende."Cuando ven¨ªa hacia Pearl Harbor yo tambi¨¦n ten¨ªa dudas de c¨®mo me sentir¨ªa aqu¨ª, qu¨¦ pasar¨ªa por mi mente al recordar a los miles de hombres que perdieron sus vidas. Pero mi coraz¨®n no guarda ning¨²n rencor, y espero que, a pesar de todo, el suyo tampoco lo guarde", dijo el presidente a los 40.000 supervivientes reunidos en Oahu, la isla m¨¢s poblada del archipi¨¦lago de Hawai.

"Yo tampoco siento rencor", dice William Finn, "Io que siento es miedo de que las nuevas generaciones no hayan aprendido lo suficiente corno para que esto no se repita". La mayor¨ªa de los viejos soldados parec¨ªan de acuerdo con el mensaje de reconciliaci¨®n transmitido por el presidente. "Son otros tiempos" afirma Joe Brannan, un antiguo oficial del Ej¨¦rcito. "Yo incluso tengo varios amigos japoneses, y no pienso que tengan que pedirme perd¨®n por nada".

Otros tiempos

Y son otros tiempos. EE UU ha cambiado y Jap¨®n tambi¨¦n. Este a?o llegaron al archipi¨¦lago hawaiano casi siete millones de turistas japoneses, de los que depende econ¨®micamente el 50 Estado de la uni¨®n. El mes pr¨®ximo, Bush visitar¨¢ Tokio para sentar las bases de una nueva colaboraci¨®n entre los dos pa¨ªses, m¨¢s acorde con el final de la guerra fr¨ªa.[El Gobierno japon¨¦s decidi¨® ayer presentar excusas porel ataque a Pearl Harbor para crear un clima propicio a la visita de Bush y ante la falta de inter¨¦s del Parlamento de adoptar una resoluci¨®n sobre la responsabilidad de Jap¨®n en la guerra, informa France Presse].

Hawai, que siempre ha desarrollado un papel fundamental como puente entre Estados Unidos y Asia, tendr¨¢ que contribuir tambi¨¦n a que ambos pa¨ªses se entiendan mejor en estos tiempos de competencia comercial. En los a?os treinta, "los japoneses quisieron utilizar Hawai como plataforma de lanzamiento para dominar el mundo", dice el historiador Gavan Daws en su libro Shoal of Time. En los a?os noventa, la penetraci¨®n econ¨®mica y cultural de Jap¨®n en estas islas parece un hecho irreversible. Los j¨®venes soldados encargados de defender el archipi¨¦lago se casan con muchachas de origen japon¨¦s.

"Es indudable que nuestra guerra ha quedado anticuada", dice Finn. "Yo me doy cuenta de que, las nuevas generaciones tienen enemigos m¨¢s peligrosos que los japoneses: las drogas, el SIDA, el crimen, el desempleo, la falta de hogar. Espero que tengan tanto ¨¦xito contra ellos como lo tuvimos nosotros contra los nipones".