La huelga de 'ruteros' puede dejar sin peri¨®dicos ni revistas durante tres d¨ªas a la Comunidad de Madrid

Los lectores de la Comunidad de Madrid no podr¨¢n comprar prensa diaria ni revistas en los lugares de venta desde ma?ana, martes, y hasta el pr¨®ximo jueves incluido, si, como se prev¨¦, tiene ¨¦xito una huelga convocada por la coordinadora de distribuci¨®n de prensa y revistas y los sindicatos CC OO y UGT. La huelga se plantea por las diferencias surgidas con las empresas del sector en las negociaciones abiertas para iniciar la elaboraci¨®n del que ser¨ªa el primer convenio de ¨¢mbito regional.

Los ruteros, es decir, aquellas personas con las que las distribuidoras contratan la recogida y el reparto de la prensa hasta los kioscos, han convocado un paro en toda la comunidad de Madrid desde las 12 horas de hoy hasta las 24.00 del d¨ªa 12, despu¨¦s de no haber alcanzado un acuerdo con la representaci¨®n empresarial sobre garant¨ªas de mantenimiento de los empleos y del n¨²mero de t¨ªtulos [fondo editorial] que en estos momentos distribuyen las empresas. Estos dos puntos se han convertido en el principal escollo de unas negociaciones solicitadas inicialmente por los sindicatos para elaborar un convenio regional, y cuya plataforma, entregada por la representaci¨®n sindical el pasado d¨ªa 5, ni siquiera se ha empezado a discutir.El objetivo de la huelga, seg¨²n comunic¨® la representaci¨®n sindical a la Direcci¨®n Provincial de Trabajo, es "oponerse a la reestructuraci¨®n encubierta del sector que provoca la p¨¦rdida de m¨²ltiples puestos de trabajo; la negociaci¨®n de los movimientos de fondos editoriales que se est¨¢n produciendo en el sector y la negociaci¨®n de las reivindicaciones sociales y econ¨®micas planteadas para los trabajadores, mediante la regulaci¨®n del mismo".

Los trabajadores acusan a las empresas de haber roto los acuerdos alcanzados el pasado d¨ªa 19 de noviembre -que evitaron la realizaci¨®n de una huelga anterior- y por los que ¨¦stas se compromet¨ªan a "salvaguardar la totalidad de los puestos de trabajo del sector, mientras la negociaci¨®n dure, salvo pacto entre partes" y a "no mover los fondos editoriales en la medida de sus responsabilidades". El acuerdo establec¨ªa pues, como punto principal, el compromiso de las empresas de atenerse a esos puntos mientras durase la negociaci¨®n del nuevo convenio regional, y en todo caso por un per¨ªodo m¨ªnimo de tres meses.

Las empresas afirman que mantienen dichos compromisos en todos sus aspectos y que es la representaci¨®n laboral la que rompe el pacto al imponer, para desconvocar el paro, condiciones adicionales "que no nos dejan margen de maniobra". Estas condiciones se refieren a mantener las actuales estructuras de empleo, "eliminando la posibilidad de pactos entre las partes en cada empresa" seg¨²n la representaci¨®n patronal, y a congelar unos movimientos de fondos "de los que no somos propietarios".

Movilidad de fondos

En concreto, sobre este ¨²ltimo punto las distribuidoras afirman que s¨®lo pueden comprometerse, como lo han hecho, a trasladar la posici¨®n de los ruteros a las empresas editoras, propietarias de los t¨ªtulos que ellas distribuyen. "La movilidad de los fondos" a?aden, "no depende de nosotros. Son las empresas editoras las que deciden los contratos con las distribuidoras".

El sector de distribuci¨®n de prensa y revistas agrupa en lacomunidad de Madrid a una decena de empresas -varias de ellas pertenecientes a grupos de comunicaci¨®n- y da trabajo a unas 1.200 personas. Actualmente est¨¢ inmerso en un proceso de reestructuraci¨®n que supone fundamentalmente la agrupaci¨®n de fondos editoriales. Es decir, el reparto conjunto de varias publicaciones para un mejor aprovechamiento de los transportes, lo que puede implicar un excedente laboral que ni empresas ni trabajadores han cuantificado. La representaci¨®n patronal ha puesto de relieve que no existe ni un s¨®lo aviso de despido.

El convenio regional que empresas y trabajadores se proponen negociar ser¨ªa el primero de esta naturaleza en Madrid., aunque la mayor¨ªa de las empresas tiene sus propios convenios colectivos, que vienen regulando en los ¨²ltimos a?os sus relaciones laborales sin mayores conflictos.

Las consecuencias de la huelga quedan circunscritas al reparto de los peri¨®dicos en el ¨¢mbito estricto de la Comunidad de Madrid. Por tanto, las otras ediciones de los peri¨®dicos -y en el caso de EL PA?S, las ediciones Nacional, Valencia, Andaluc¨ªa y Catalu?a- se distribuir¨¢n normalmente.