Yelev rechaza la monarqu¨ªa en Bulgaria y llama criminal al difunto rey Bor¨ªs
El presidente de Bulgaria, Yeliu Yelev, rechaza toda posibilidad de una restauraci¨®n mon¨¢rquica en su pa¨ªs y sostiene que el difunto rey Bor¨ªs, padre de Sime¨®n, que reside en Espa?a, fue un criminal de guerra y comprometi¨® definitivamente a la dinast¨ªa. En una entrevista con EL PAIS en su despacho de Sof¨ªa, el reci¨¦n elegido jefe de Estado formul¨® el m¨¢s violento ataque contra el rey Sime¨®n, a quien muchos ven como el monarca en el exilio con mayores posibilidades de recuperar el trono perdido con la implantaci¨®n de un r¨¦gimen comunista tras la II Guerra Mundial.
"Las pretensiones de Sime¨®n son las de un peque?o comerciante que se imagina que puede llegar aqu¨ª a restaurar una dinast¨ªa comprometida y que ha sido responsable de tres cat¨¢strofes nacionales para el pueblo b¨²lgaro. Su padre impuso un r¨¦gimen dictatorial desde 1936; en su esencia, un r¨¦gimen monarco-fascista".Seg¨²n Yelev, Bor¨ªs "tambi¨¦n fue culpable de la muerte de 11.400 jud¨ªos en Macedonia y Tracia, ocupadas entonces por tropas b¨²lgaras. La dinast¨ªa est¨¢ vinculada a los dos asesinatos m¨¢s terribles de la historia b¨²lgara: el del primer ministro Stambulov en 1895 y el de Alexander Stamboliski en 1923".
"Tenemos documentos que prueban en este ¨²ltimo caso la implicaci¨®n directa en el crimen del padre del zar Sime¨®n. ?l uni¨® Bulgaria a la Alemania hitleriana y es en realidad un criminal de guerra. Con este cr¨¦dito moral y pol¨ªtico, intentar venir a restaurar aqu¨ª su propia dinast¨ªa y la monarqu¨ªa es una utop¨ªa".
Marxista o no
Las declaraciones de Yelev se producen d¨ªas despu¨¦s de que Sime¨®n acusara a Yelev de haber conseguido dividir el pa¨ªs y de considerarse fil¨®sofo marxista. "La polic¨ªa pol¨ªtica comunista estaba mejor informada que el zar Sime¨®n sobre mi persona. Sab¨ªan que yo soy antimarxista. Aqu¨ª sabemos mejor qui¨¦n es marxista y qui¨¦n noEl presidente de la rep¨²blica rechaz¨® de plano una consulta popular al respecto, y lleg¨® a decir que "el pueblo b¨²lgaro ya decidi¨® en l946".
El presidente Yelev se desmarca claramente de otros l¨ªderes de la Uni¨®n de Fuerzas Democr¨¢ticas (UDF), que hablan con gran respeto e incluso entusiasmo del rey Sirne¨®n, que vive en Espa?a desde que tuvo que huir del pa¨ªs. El presidente del Parlamento, Stefan Savov, se entrevist¨® con el rey Sime¨®n en Madrid el pasado 13 de enero, y preside ya una comisi¨®n para localizar los restos mortales del padre del rey. Los restos, enterrados en un principio en el cementerio de Rila, fueron trasladados despu¨¦s a la residencia real de Vrana para impedir todo tributo p¨²blico a la monarqu¨ªa bajo el r¨¦gimen comunista. En 1954 la tumba fue dinamitada, pero, al parecer, alguien logr¨® salvar al menos un frasco con el coraz¨®n del monarca.
Savov, presidente asimismo del Partido Democr¨¢tico, el m¨¢s fuerte en la UDF, manifest¨® a este peri¨®dico que "el rey Sime¨®n es un gran europeo que est¨¢ perfectamente informado sobre la situaci¨®n b¨²lgara, y es un hombre muy pol¨ªtico".
Savov se declar¨® partidario de un refer¨¦ndum, pero siempre seg¨²n los procedimientos establecidos, que exigen para su convocatoria una mayor¨ªa parlamentaria de dos tercios. "Con el Parlamento actual no es posible, pero las futuras elecciones pueden crear una correlaci¨®n de fuerzas que lo permitan".
En una conversaci¨®n con EL PAIS, el primer ministro, Filip Dimitrov, no quiso comprometerse con una postura a favor o en contra de la restauraci¨®n mon¨¢rquica, pero admiti¨® que "hay discusiones al respecto".
Sin embargo, s¨ª se?al¨® que hay que dar al pueblo b¨²lgaro la posibilidad de decidir entre opciones claras. "Me parece bien que se decida entre comunismo y democracia y que . se decida entre monarqu¨ªa y rep¨²blica, pero ser¨ªa necio querer optar entre comunismo y monarqu¨ªa o entre crisis econ¨®mica y monarqu¨ªa. ?stas no son opciones reales".
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.