Venezuela cambia de rumbo para evitar otro golpe
El presidente Carlos Andr¨¦s P¨¦rez trat¨® de salir a flote de la profunda crisis que embarga a Venezuela con un sorprendente mensaje a la naci¨®n, a trav¨¦s de la radio y la televisi¨®n, en el que prometi¨® dar un cambio de rumbo a su pol¨ªtica econ¨®mica y social para superar el descontento popular y recuperar la confianza del pa¨ªs. Con rostro cansado, asegur¨® que no dimitir¨¢ y anunci¨® la celebraci¨®n de un refer¨¦ndum para antes de mayo sobre la reforma de la Constituci¨®n. Mientras, por todo el pa¨ªs crec¨ªa el aluvi¨®n de rumores sobre el peligro de un nuevo golpe de Estado.
Cuando todos apostaban por la inminente ca¨ªda de su Gobierno, debido a la falta de autoridad y al visible vac¨ªo de poder en que se hab¨ªa sumergido a un mes de cumplirse la fallida asonada militar del 4 de febrero pasado, P¨¦rez, a qui¨¦n el agua parec¨ªa llegarle al cuello, dej¨® a un lado su larga sordera pol¨ªtica y propuso, en la noche del jueves (madrugada de ayer en Espa?a), rectificar su gesti¨®n administrativa.P¨¦rez ley¨® un extenso discurso, en el que recog¨ªa la mayor¨ªa de las recomendaciones que le hicieron sus asesores del Consejo Consultivo, nombrado por ¨¦l mismo hace 10 d¨ªas. Su rostro era grave, pero tranquilo y sereno. Sus palabras no ten¨ªan la elocuencia ni la vivacidad que tradicionalmente le han caracterizado.
En primer lugar, dej¨® por sentado que ¨¦l no va a dimitir, falt¨¢ndole dos a?os para concluir su presidencia. Dijo: "Estoy al frente de la responsabilidad de conducir el pa¨ªs (...). Estoy abierto al di¨¢logo y en la mejor disposici¨®n de escuchar los planteamientos y proposiciones". P¨¦rez se quej¨® de que le quieren atribuir todos los males de la democracia cuando esos fueron "engendrados por la dictadura".
Refer¨¦ndum
El mensaje estuvo lleno de promesas y ideas reformistas que no son nada novedosas, ya que estaban incluidas en su programa electoral de 1988. Para empezar anunci¨® la convocatoria de un refer¨¦ndum antes de mayo para reformar la Constituci¨®n, elaborada en 1961.Tambi¨¦n acept¨® la designaci¨®n de un primer ministro, de una Asamblea Constituyente y de un Gobierno de unidad nacional, as¨ª como la reducci¨®n a nueve de los m¨¢s de 20 ministerios actuales. Asimismo, se manifest¨® a favor de la reforma del poder judicial, del sistema penal y de la Corte Suprema de Justicia, para reemplazar a los magistrados actuales por independientes nombrados por el Parlamento. Tambi¨¦n prometi¨® luchar contra la corrupci¨®n administrativa.
En materia econ¨®mica, llam¨® la atenci¨®n su anuncio de congelar temporalmente los precios de la gasolina y de los servicios b¨¢sicos, la estabilizaci¨®n de los precios del arroz, aceite, harina de ma¨ªz, pastas y leche; la exoneraci¨®n de aranceles para la compra de taxis y autobuses; la puesta en marcha de un programa de viviendas para la clase media y los militares, con tasas de inter¨¦s inferiores a las del mercado; la venta de medicamentos sin marcas m¨¢s baratos, el fomento de las farmacias populares y comedores p¨²blicos.
El presidente hizo hincapi¨¦ en la reforma tributar¨ªa. Destac¨® que se aplicar¨¢n impuestos a los art¨ªculos de lujo y a los beneficios de las empresas, y que se considerar¨¢ la evasi¨®n fiscal como un delito. Se propiciar¨¢ un plan agresivo de recaudaci¨®n fiscal, y los directores de las aduanas se nombrar¨¢n por concurso, algo que fue recomendado por los asesores aduaneros de Espa?a.
Pero mientras Carlos Andr¨¦s P¨¦rez anunciaba en Caracas el cambio de rumbo que piensa imprimir al pa¨ªs, en Washington su equipo econ¨®mico, que hab¨ªa viajado para tranquilizar a los inversores norteamericanos, afirmaba que la pol¨ªtica econ¨®mica no cambiar¨ªa.
La l¨ªnea neoliberal que actualmente inspira la pol¨ªtica econ¨®mica venezolana fue adoptada por el presidente hace tres a?os en una carta de intenciones al Fondo Monetar¨ªo Internacional, en donde se comprometi¨® a seguir las recetas de esta organizaci¨®n, a cambio de la refinanciaci¨®n de la deuda externa y la concesi¨®n de pr¨¦stamos de las instituciones internacionales. La primera consecuencia del nuevo rumbo fue un estallido social, el llamado caracazo del 27 de febrero de 1989, al que siguieron el descalabro electoral del partido del Gobierno en las municipales de 1990 y el intento golpista del 4 de febrero.
El ¨²nico cambio que se observa en las promesas del jueves pasado es el referido a la suspensi¨®n de los aumentos en los precios de la gasolina y la electricidad, pero el presidente la calific¨® de "temporal", lo que indica que su compromiso con el FMI se mantiene para cuando vuelva la calma.
Su mensaje fue recibido con poco entusiasmo por la ciudadan¨ªa. La tensi¨®n en las Fuerzas Armadas, mientras tanto, se mantiene pese a la insistencia del ministro Fernando Ochoa Antich en afirmar que est¨¢n unidas, y que hay normalidad. Las tropas fueron acuarteladas en situaci¨®n de alerta, tras los dos asaltos cometidos a comienzos de esta semana, uno a la sede del Ministerio de Defensa y otro a la base fluvial de Ciudad Bol¨ªvar.
A esto se a?ade la gran movilizaci¨®n que se est¨¢ preparando clandestinamente para el 10 de marzo. "El 10 a las 10, CAP [Carlos Andr¨¦s P¨¦rez] fuera", rezan las pancartas aparecidas ayer en las paredes de la ciudad.
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