Catalanes, vascos y gallegos aspiran a una presencia directa europea

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, propugna la creaci¨®n de una segunda c¨¢mara europea, en la que est¨¦n representadas las regiones, como ¨®rgano canalizador de las aspiraciones nacionalistas, en auge en Catatalu?a, Pa¨ªs Vasco y Galicia. Esta propuesta cuenta con las simpat¨ªas tanto del nacionalismo vasco como de presidente de la Xunta galega, Manuel Fraga. Paralelamente, los nacionalistas vascos y catalanes coinciden en sus cr¨ªticas al Comit¨¦ de las Regiones, creado en la cumbre de Maastrich, por mezclar la representaci¨®n auton¨®mica y municipal.

El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, intent¨® a?os atr¨¢s, sin ¨¦xito, que la Asamblea de las Regiones de Europa (ARE), plataforma de la que era vicepresidente, fuera reconocida como prefiguraci¨®n de esta segunda c¨¢mara, a la que se refer¨ªa como futuro senado europeo, informa Enric Company. La batalla para obtener un reconocimiento institucional de las regiones, en la que jugaban tanto o m¨¢s fuerte que ¨¦l los I?ender alemanes deriv¨®, finalmente, en la creaci¨®n en noviembre de 1991, del Comit¨¦ de las Regiones de la Comunidad Europea gracias a la fuerte presi¨®n ejercida por los gobiernos de Alemania y Espa?a.Este Comit¨¦, al tener s¨®lo car¨¢cter consultivo y englobar junto a las regiones a los municipios y otras instancias de poder local, es rechazado por los nacionalistas catalanes, que siguen reclamando instancias de representaci¨®n pol¨ªtica para las regiones europeas.

En paralelo, los sucesivos gobiernos dirigidos por Pujol han reclamado sin ¨¦xito que las comunidades aut¨®nomas tengan un canal para intervenir en la fijaci¨®n de los criterios que el Gobierno espa?ol sostiene en los Consejos de Ministros de la Comunidad Europea en aquellas cuestiones que afectan directamente a las comunidades aut¨®nomas o a sus competencias exclusivas.

Desde el Partido Nacionalista Vasco (PNV), la representaci¨®n de las comunidades aut¨®nomas hist¨®ricas en el Comit¨¦ de las Regiones se ve "completamente devaluada", seg¨²n informa Aitor Guenaga. El portavoz del nacionalismo conservador en el Congreso de los Diputados, I?aki Anasagasti, no oculta la insatisfacci¨®n ni el pesimismo que rodea a los peneuvistas con vistas a su participaci¨®n activa en la construcci¨®n europea. Anasagasti considera casi una afrenta la intenci¨®n del Gobierno socialista de equiparar a las tres comunidades hist¨®ricas con el resto de comunidades e incluso con los municipios.

Por todo ello, el PNV propone que los 21 miembros que corresponden a Espa?a en el Comit¨¦ de las Regiones sean elegidos por las propias comunidades aut¨®nomas y no por el Gobierno. Adem¨¢s, exigen que las comunidades hist¨®ricas mantengan una doble representaci¨®n en ese ¨®rgano y que las 14 comunidades aut¨®nomas restantes tengan un representante. En su defecto, y para despertar al somnoliento presidente espa?ol, el PNY estar¨ªa dispuesto, seg¨²n Anasagasti, a reavivar en Euskadi el debate sobre el derecho a la autodeterminaci¨®n, zanjado en septiembre de 1991, a trav¨¦s de su ejercicio en el Parlamento vasco.

Anasagasti est¨¢ convencido de que el PNV puede influir m¨¢s en la construcci¨®n de Europa a trav¨¦s de la Uni¨®n Europea Democristiana que en cualquier otro foro de los ya existentes. Con todo, el PNV denuncia el "d¨¦ficit democr¨¢tico" del Parlamento europeo y no duda en que la incorporaci¨®n de nuevos estados miembros a la CE forzar¨¢ una reorganizaci¨®n del entramado institucional actual. Un proceso Iento y paulatino" donde los estados deber¨¢n ceder m¨¢s soberan¨ªa a los organismos supranacionales de nueva creaci¨®n.

Al presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, le llovieron las cr¨ªticas cuando dijo hace poco tiempo que "el Estado en Catalu?a debe ser la Generalitat". Pero a Pujol le ha salido un inesperado defensor de su propuesta: el presidente de la Xunta de Galicia y fundador del PP, Manuel Fraga, informa Xos¨¦ Hermida.

Fraga, con un discurso autonomista, aspira a conseguir la presidencia de la Asamblea de Regiones Europeas, que se re¨²ne en Galicia el pr¨®ximo mes de julio. A su juicio, las regiones deben tener un mayor protagonismo dentro de la CE y ya ha propuesto que se cree un Senado europeo para representar los intereses de esas comunidades.

La llegada de Fraga a Galicia coincidi¨® con un fuerte auge del nacionalismo radical. El Bloque Nacionalista Galego obtuvo casi el 8% de los votos en las ¨²ltimas elecciones auton¨®micas y consolid¨® este apoyo en los comicios municipales de mayo pasado. Esta formaci¨®n, que agrupa desde socialdem¨®cratas a marxistas -leninistas, rechaza la Constituci¨®n, aunque nunca hab¨ªa sido abiertamente partidaria de la independencia.