"La hoja de reclamaciones est¨¢ bajo llave"

-?La hoja de reclamaciones?La turista atina a pedirla en espa?ol, en la cafeter¨ªa Cristina, en un rinc¨®n de la plaza. Eran las tres de la tarde del d¨ªa 1 de mayo.

La joven comprueba que por una tortilla con la patata cruda, una docena de pedazos de queso, pan y agua mineral le han clavado 3.900 pesetas. Pide la lista de precios y se da cuenta de que le han cobrado 1.700 pesetas de m¨¢s.

-?La hoja? Hoy no.- Ma?ana -comenta el joven camarero que la atendi¨®, muy nervioso.

-Es demasiado -intenta explicarle al camarero, con palabras en ingl¨¦s y espa?ol, mostrando su factura.

El camarero, muy r¨¢pidamente, le hace una nueva cuenta con los precios correctos y pretende cambi¨¢rsela por la otra. La extranjera se enoja:

-?Pero yo he pagado m¨¢s!

-Bueno, te devuelvo el dinero, y t¨² me das la factura.

-Hoja de reclamaciones.

-Hoy no hay hoja. Est¨¢ encerrada en el despacho del jefe, y no est¨¢ el jefe hoy. Ma?ana. Mira, te doy el dinero, cambiamos las facturas, y ma?ana vienes a quejarte. ?Entiendes?

Factura rota

Ella insiste. Se han acercado varios camareros que quieren que les deje ver la factura.

-Hoy no -repite el camarero-; mira, me he equivocado. Pensaba que te hab¨ªas tomado otra cosa. Hoy es mi primer d¨ªa.

Pero ¨¦l hab¨ªa hecho la cuenta frente a la mesa, con la consumici¨®n casi intacta.

-Hoja de reclamaciones -insiste la turista.

-Pues no -le repiten.

El camarero resuelve el problema a su manera. Le arrebata la-factura a la chica y la rompe. Y pisa un trozo con el pie.

?Tienen alguna defensa los tres millones y medio de turistas que visitan la Capital Europea de la Cultura? Un tercio de ellos viene de otros pa¨ªses: 1.213.281 extranjeros pasaron por Madrid en 1991. "Nosotros inspeccionamos sobre las reclamaciones que pone el cliente", asegura Juan Jos¨¦ Blardony, subdirector de Turismo de la Comunidad. "?l tiene que pedir la hoja de reclamaciones". Uno de los principales motivos de protesta ante su organismo -en 1991 recibi¨® 665 reclamaciones sobre restaurantes- es precisamente que no se facilita tal hoja. Y para un extranjero parece m¨¢s dif¨ªcil.

Estas informaciones han sido elaboradas con la ayuda de los periodistas Angela G?ttsche y Fabrice Nod¨¦ Laglois