'Zapping' divino

Algunos de los de la actual generaci¨®n de cuarentones salirnos de la obra nacional cat¨®lica de nuestra infancia-juventud porque, en un imperdonable descuido , alguien nos indujo a la lectura, lo cual no hizo sino activar resabios libertinos impresos en el subconsciente colectivo por alg¨²n antepasado d¨ªscolo, apart¨¢ndonos del camino que nos hab¨ªan marcado, lleno de pron¨®sticos de ceguera, necrosis de pene, loas al Real Madrid y un extra?o batiburrillo de c¨¢nticos gregorianos y patri¨®ticos. Est¨¢ bien que Dios exista, nos dijimos, pero, le?e, no hay por qu¨¦ darle tanta importancia; al fin y al cabo, tendr¨¢ cosas m¨¢s interesantes que hacer que estar pendiente de las peque?as miserias de los habitantes de un planeturrio perdido en la inmensidad de las galaxias. As¨ª que nos desencaminamos, aunque bien es verdad que nadie nos persigui¨® por ello como a esos pr¨®fugos que hoy en d¨ªa cuentan kafkianas experiencias en EL PA?S.A?os despu¨¦s de aquella defecci¨®n sigo convencido no s¨®lo de que no hay motivos para tomarse estos asuntos extraterrenales tan en serio; sino, de que los humanos vivir¨ªamos menos crispados sin. esa legi¨®n de predicadores-religiosos y laicos que, como buitres tras la batalla, acechan a un mundo convulso y melanc¨¢lico de aquellas soluciones globales que le manten¨ªan en permanente expectativa ut¨®pica.

No me extra?ar¨ªa nada que el presunto Ser Supremo se dedicara al zapping cada vez que en su pantalla c¨®smica aparece un nuevo episodio del culebr¨®n de La obra, y el presumible ascenso p¨®stumo de un cura a beato.

Y es que, con toda probabilidad, el expresivo ser triangular de ojo c¨ªclope que dibuja M¨¢ximo preferir¨ªa m¨¢s. humanismo solidario y menos perifollos vaticanistas. Es un suponer, claro.-