Major admite que los esp¨ªas brit¨¢nicos existen

El secreto m¨¢s p¨²blico del mundo ha sido por fin elevado al rango de las verdades oficiales: el M16, el celeb¨¦rrimo servicio de espionaje brit¨¢nico, existe. John Major lo reconoci¨® por primera vez el mi¨¦rcoles, en la C¨¢mara de los Comunes. E incluso nombr¨® a su jefe, Colin McColl. La presentaci¨®n en sociedad del M16 se produce 83 a?os despu¨¦s de su creaci¨®n, y responde a las peticiones del propio McColl, que ven¨ªa quej¨¢ndose de los efectos del secretismo: "Nos hac¨ªa parecer imb¨¦ciles delante de todo el mundo".
Era una paradoja intr¨ªnsecamente brit¨¢nica. El M16 no exist¨ªa, pero ocupaba un enorme edificio de 20 plantas en pleno centro de Londres, junto al T¨¢mesis. El absurdo roz¨® lo insuperable cuando empez¨® a construirse, hace unos meses, una nueva sede para el MI6: a¨²n m¨¢s grande, a¨²n m¨¢s visible (justo enfrente de Westminster en Vauxhall) y a¨²n m¨¢s popular.
Major cumpli¨® con los deseos de Colin Mc Coll, jefe del M16, al expresar su prop¨®sito de "barrer las telara?as de secretismo que velan innecesariamente muchas de las actividades del Gobierno". El primer ministro anunci¨® la presentaci¨®n de una ley de control p¨²blico sobre el M16, aunque tal control no recaer¨¢ en el Parlamento, sino en un alto funcionario nombrado por Downing Street.
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