"Ten¨ªa varios muertos encima de m¨ª, s¨®lo quer¨ªa escapar"
"No pod¨ªa salir porque ten¨ªa varios muertos encima de m¨ª. Fue todo muy r¨¢pido. No pod¨ªa ni gritar, s¨®lo quer¨ªa salir de all¨ª, escapar". Ivonne Almeida, una portuguesa residente en Francia, de 68 a?os, consigui¨® pisar tierra despu¨¦s de que los bomberos de Vitoria retiraran varios asientos del autob¨²s para hacer un t¨²nel que permitiera su evacuaci¨®n. Con la pierna herida, restos de sangre en el vestido y un derrame en el ojo izquierdo, s¨®lo pod¨ªa llorar y pronunciar una frase casi obsesiva: "Ten¨ªa gente encima que no se mov¨ªa. Ten¨ªa gente muerta encima de m¨ª", dec¨ªa en un franc¨¦s entrecortado.Sin embargo, reconoc¨ªa su gran suerte: 16 personas permanec¨ªan cubiertas con una s¨¢bana al pie de la carretera, rodeados de maletas, zapatos, trapos ensangrentados y un incesante sonido de llantos y gritos de dolor. Uno de los ni?os, de nacionalidad portuguesa, falleci¨® en el traslado. La mayor¨ªa de los¨®cupantes del autob¨²s viajaban dormidos. No recuerdan, pues, c¨®mo se produjo el desastre. Tan s¨®lo un violento despertar.
Makumba Gnatumba, un zaire?o de 25 a?os, s¨®lo sufri¨® rotura del brazo. Los jirones de su camisa y las heridas en su cara y piernas testimoniaban la cat¨¢strofe. "Iba despierto cuando todos dorm¨ªan. S¨®lo recuerdo un fuerte giro del autocar para evitar a un cami¨®n que fren¨®. Luego todo dio la vuelta y otros viajeros me cayeron encima. Creo que ¨ªbamos muy deprisa". En el lugar del accidente hay una se?al de tr¨¢fico que limita la velocidad a 60 Km por hora.
La oscuridad de la noche impidi¨® que muchos de los pasajeros se dieran cuenta incluso de la gravedad del siniestro. Pedro Anitua, reponsable de los bomberos de Vitoria relata: "Muy pocos de los pasajeros pudieron salir por su propios medios, estaban aprisionados entre las v¨ªctimas y los asientos. El autob¨²s volc¨® sobre su costado izquierdo en medio de un mont¨®n de maletas y ropas". Anitua destaca la serenidad de unos viajeros que, a pesar del desastre, facilitaron en todo momento las labores de evacuaci¨®n. "No hubo escenas de p¨¢nico a pesar de que el panorama no era para menos", se?al¨®.
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