Una Comunidad Europea ladeada

A veces, una representaci¨®n gr¨¢fica inadecuada puede dar lugar a que la imagen que queda grabada en nuestras retinas act¨²e de un modo subconsciente en la impresi¨®n que de la realidad tenemos. Esta reflexi¨®n viene a cuenta del mapa de Europa que acompa?a al art¨ªculo Europa resucita en tren, correspondiente a EL PA?S del lunes 4 de mayo.En dicho art¨ªculo, la representaci¨®n gr¨¢fica del mapa de la Comunidad Europea se encuentra ladeada, girada sobre su eje, conformando una figura romboidal en la que la pen¨ªnsula Ib¨¦rica se sit¨²a como uno de los extremos.

Nada m¨¢s alejado de la realidad. Si tomamos como ejes verticales los meridianos, y m¨¢s concretamente el meridiano de Greenwich, el conjunto del territorio de la Europa comunitaria dibuja casi un cuadrado perfecto en el que Bilbao queda situado a 3? oeste de longitud del mencionado meridiano. Por el contrario, la representaci¨®n geogr¨¢fica correspondiente al art¨ªculo de EL PA?S sit¨²a en la misma vertical de Londres (cero grados de longitud) a Marsella (6? este de longitud), dando lugar a una interpretaci¨®n totalmente desfigurada de la localizaci¨®n geogr¨¢fica de las ciudades europeas, y en concreto de Bilbao.

Este tipo de representaciones poco afortunadas favorece la sensaci¨®n de que Bilbao, el conjunto de Euskal Herria, e incluso toda el ¨¢rea peninsular, se encuentra totalmente alejado del eje de desarrollo econ¨®mico que enlaza Londres-Par¨ªs-sur de Alemania-norte de Italia, conden¨¢ndonos a un segundo plano. Creo que es necesario tratar con sumo cuidado este tipo de representaciones y que la inconsciencia, a base de repetirse, haga calar en nuestro interior una sensaci¨®n -que con el tiempo corre el riesgo de convertirse en convencimiento- de marginalidad que, al menos desde Bilbao, no podemos consentir.-