Barcelona 92, mejor sin putas
El Ayuntamiento quiere alejar a las prostitutas de las zonas 'bien' durante los Juegos
"Que se sepa: vamos a luchar; y si hace falta, cortamos la Diagonal. Somos gente competente y tenemos que comer. Montaremos una movida como la de hace ocho a?os, pero de aqu¨ª no nos movemos". Luisa, de 38 a?os, arranc¨® casi aplausos de una veintena de prostitutas que tra bajan en los aleda?os del Camp Nou y que sienten pavor ante la decisi¨®n del Ayuntamiento de trasladarlas a la Zona Franca durante los JJ OO. Dicen que la soledad del pol¨ªgono industrial las convertir¨¢ en presas f¨¢ciles de de lincuentes.Luisa, con otras dos compa?eras, tom¨® un taxi el jueves por la noche en direcci¨®n a la Zona Franca para inspeccionar el nuevo escenario elegido por el Ayuntamiento. Su impresi¨®n no pudo ser m¨¢s negativa: "Lo vi fatal. Hay poca luz y por all¨ª no pasa nadie. Est¨¢ toda la porquer¨ªa: drogas, gitanos que delinquen. Habr¨¢ que ir con cuatro ojos o nos van a matar". Luisa habla con la autoridad moral que le confiere ejercer la prostituci¨®n desde hace 10 a?os en la misma zona. Es una de las viejas. Las m¨¢s j¨®venes, que apenas deben superar la veintena, asienten. Son las cinco de la ma?ana. Hace fr¨ªo, pero los ¨¢nimos est¨¢n que hierven.
Tienen aut¨¦ntico p¨¢nico a los gitanos que viven en Casa Ant¨²nez. "Los travestidos nos han explicado que el otro d¨ªa fueron con guitarras a tocar unas rumbas y les dijeron que ya nos esperan", explica Sonia, de 20 a?os, que ya dibuja para s¨ª un tr¨¢gico destino: "Nos rodear¨¢n con cuchillos y nos quitar¨¢n todo el dinero. Esto no es ninguna broma. Tengo una hija y tenemos que seguir comiendo". Su marido, Javier, susurra: "Est¨¢n alborotadas porque los clientes les han dicho que all¨ª no van ni locos".
Nada tienen contra los JJ OO. Y han buscado soluciones a primera vista aplastantes: sus horarios de trabajo no coincidir¨¢n con los de las pruebas deportivas. Las medidas de seguridad que se aplicar¨¢n en el ¨¢rea ol¨ªmpica tampoco les valen: "Si nosotras no vamos a provocar incidentes", razonan, "no tienen por qu¨¦ echarnos. En el Camp Nou ha habido conciertos y partidos, y no hemos aparecido hasta que se han acabado. Si quieren, podemos reducir la jornada de doce de la noche a seis de Ia ma?ana o situarnos temporalmente en un lugar mejor".
La soledad es mayor en la avenida del Doctor Mara?¨®n, donde trabajan los travestidos. ?ngela est¨¢ recostada en su coche; Virginia, de 19 a?os, que parece sacada de un desfile de modelos, se pasea con un maillot blanco y un malet¨ªn. Coinciden en que se avecinan malos tiempos. Durante los JJ OO, ?ngela tomar¨¢ vacaciones y Virginia intentar¨¢ trabajar en un club.
?ngela, que curs¨® periodismo, vislumbra una conflictividad inevitable con algunos gitanos: "La prostituci¨®n atrae delincuencia. Si la sit¨²as en un lugar de extracci¨®n social media o alta, donde se mueve dinero como aqu¨ª, al igual que pasa en Roma o Par¨ªs, no ocurre nada. Pero si la mezclas con otro problema social, como el tr¨¢fico de drogas, explota". Su preocupaci¨®n es ¨¦l d¨ªa despu¨¦s: "Veremos qu¨¦ pasa cuando, tras los Juegos, Barcelona se reencuentre a s¨ª misma. Temo que sea un pretexto para sacamos de aqu¨ª"'.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Archivado En
- Travestismo
- Juegos Ol¨ªmpicos 1992
- Identidad sexual
- Prostituci¨®n
- Polic¨ªa municipal
- Genoma
- Barcelona
- Genes
- Explotaci¨®n sexual
- Juegos Ol¨ªmpicos
- Catalu?a
- ADN
- Ayuntamientos
- Delitos sexuales
- Polic¨ªa
- Sexualidad
- Fuerzas seguridad
- Cromosomas
- Competiciones
- C¨¦lulas
- Deportes
- Administraci¨®n local
- Delitos
- Gen¨¦tica
- Administraci¨®n p¨²blica