Trabaja, ni?o, trabaja
El trabajo infantil aumenta en el mundo y sus condiciones empeoran, seg¨²n la OIT
Son alba?iles de ocho a?os, porteadores de bultos de 10, sirvientas de seis, mineros y tejedores de alfombras de 12. Cientos de millones de ni?os de todo el mundo sacrifican diariamente su salud, su educaci¨®n y su infancia en la lucha contra su pobreza y la de su familia. Seg¨²n el informe El trabajo en el mundo, 1992, hecho p¨²blico por la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT) con vistas al D¨ªa Internacional del Ni?o, que se celebra hoy, las condiciones laborales de la infancia tienden a empeorar y su n¨²mero aumenta, no s¨®lo en t¨¦rminos absolutos, sino relativos.
La OIT, ante la imposibilidad de erradicar a corto plazo el trabajo infantil, respalda programas de protecci¨®n en materia de salud, alimentaci¨®n, educaci¨®n no escolar, formaci¨®n profesional y la supresi¨®n de las tareas m¨¢s peligrosas. El pasado 16 de junio, 34 ni?as menores de 12 a?os fueron liberadas del m¨¢s grande y antiguo pensionado de Dhaka (Bangladesh), donde eran forzadas a prostituirse. Las peque?as hab¨ªan sido vendidas por algo m¨¢s de 10.000 pesetas y eran ofrecidas a los clientes -obreros, conductores y j¨®venes de la regi¨®n- a 250 pesetas por pase.Denuncias como la que acaba de hacer un sindicalista de Malta en la Conferencia Internacional de] Trabajo, reunida en Ginebra, sobre el empleo de menores en las trastiendas de los locales tur¨ªsticos de su pa¨ªs, muestran que el hecho sigue ah¨ª larvado, muy cerca de la rica Europa.
Seg¨²n el informe El trabajo en el mundo, el problema no se limita a los pa¨ªses en desarrollo, sino que tambi¨¦n se da en Italia y Espa?a -m¨¢s de 100.000 en este ¨²ltimo-, generalmente en la agricultura. Y en Estados Unidos, donde suelen ser hijos de inmigrantes que trabajan en el campo, en establecimientos de comida r¨¢pida y en f¨¢bricas de ropa. Seg¨²n un estudio oficial de 1990, entre 1983 y 1990 aumentaron en un 250% las violaciones de las leyes sobre el trabajo infantil en ese pa¨ªs.
No obstante, el grueso del problema se da en los pa¨ªses del Tercer Mundo, donde la mayor¨ªa de los ni?os que trabajan lo hacen porque su familia es pobre, y cuando est¨¢ en peligro la supervivencia todo el mundo tiene que echar una mano.
Pese a la dificultad de obtener cifras fiables -muchos son siervos o trabajan en la econom¨ªa sumergida-, el informe calcula que los ni?os constituyen ya en Asia el 11% de la poblaci¨®n activa -s¨®lo en la India hay unos 44 millones-, y en ?frica el 17%. En algunas ciudades de Am¨¦rica Latina trabajan hasta el 26% de los ni?os. Brasil se lleva la palma: seg¨²n una encuesta oficial, siete millones, el 18% de los ni?os entre 10 y 14 a?os, son econ¨®micamente activos.
Siervos o esclavos
El caso m¨¢s escandaloso de trabajo forzoso de ni?os a causa de la pobreza es el de los siervos. Un informe de la OIT calcula que hay varios millones de ni?os siervos en Asia suroriental. A veces ocurre que los padres han obtenido un pr¨¦stamo y toda la familia tiene que devolverlo trabajando. Pero en la pr¨¢ctica la deuda no se reduce nunca, por el fraude que existe y por el inter¨¦s usurario, y la familia queda as¨ª esclavizada por varias generaciones.
Estas pr¨¢cticas, alimentadas por el miedo, la ignorancia y la intimidaci¨®n, aunque ilegales, son corrientes en muchos pa¨ªses. En la India se calcula que hay un mill¨®n de ni?os que trabajan en r¨¦gimen de servidumbre en f¨¢bricas de ladrillos, canteras, la construcci¨®n y la confecci¨®n de alfombras. Recientemente, una decisi¨®n judicial liber¨® a miles de ellos en Pakist¨¢n del trabajo forzoso en las f¨¢bricas de ladrillos.
El documento subraya que todos esos ni?os venden en parte su infancia, pero ninguno tanto como los prostituidos, que han aumentado en pa¨ªses como Tailandia y Sri Lanka con el turismo masivo. Este y los dem¨¢s trabajos en las calles de las grandes ciudades son los m¨¢s peligrosos, f¨ªsica y psicol¨®gicamente.
La mayor¨ªa de los ni?os que trabajan no ganan nada, ya que o ayudan a sus padres, o son siervos, o cobran en especie. Pero los asalariados reciben cantidades m¨ªseras: tres d¨®lares semanales en las f¨¢bricas de bombillas de Indonesia por 48 horas; la misma cantidad en Zimbabue por 60 horas, en la recolecci¨®n del caf¨¦; un d¨®lar al d¨ªa en las f¨¢bricas de alfombras de Nepal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.