Clinton promete que las mujeres seguir¨¢n teniendo el derecho al aborto
La mujer y su demanda de defender el derecho al aborto han ocupado un papel protagonista en la convenci¨®n dem¨®crata de Nueva York. El propio Bill Clinton sali¨® el martes de su hotel para reunirse con un grupo feminista de su partido, al que prometi¨® que su presencia en la Casa Blanca ser¨ªa una garant¨ªa de que las mujeres podr¨ªan seguir decidiendo libremente sobre la interrupci¨®n voluntaria del embarazo.
Con el objetivo de atraer ese sector del electorado, aparentemente resentido por la pol¨ªtica de la Administraci¨®n republicana, los dirigentes dem¨®cratas han dejado m¨¢s tiempo que nunca para que las delegadas expongan sus opiniones sobre la representaci¨®n pol¨ªtica de las mujeres y otras reivindicaciones sociales.Clinton, a la salida de la reuni¨®n con las feministas, fue abordado por un grupo antiabortista que le entreg¨® un paquete que conten¨ªa un feto. El candidato presidencial lo abri¨® y lo apart¨® con un gesto d¨¦ disgusto. La convenci¨®n escuch¨® ese mismo d¨ªa a seis mujeres republicanas que expresaron su apoyo a la posici¨®n dem¨®crata en defensa del derecho al aborto.
El movimiento feminista ha aumentado considerablemente su fuerza en EE UU a ra¨ªz del impacto causado por las denuncias de acoso sexual de Anita Hill contra el juez Clarence Thomas, y por las amenazas que existen por parte del Gobierno republicano y de los jueces conservadores del Tribunal Supremo contra la sentencia del caso Roe contra Wade, que legaliz¨® el aborto en el pa¨ªs hace 19 a?os.
La pol¨¦mica sobre el aborto es la que m¨¢s manifestantes ha movilizado en torno a la convenci¨®n dem¨®crata, donde tambi¨¦n se muestra el incremento de la preocupaci¨®n por otros asuntos que no son estrictamente pol¨ªticos: el sida, el ecologismo y las reivindicaciones de los homosexuales.
La enferma de sida, Elizabeth Glaser, pronunci¨® un discurso muy emotivo ante la convenci¨®n: "No s¨¦ si podr¨¦ resistir cuatro a?os m¨¢s de Administraci¨®n republicana. Soy capaz de hacer frente a la muerte por enfermedad, pero no quiero morir por culpa de la insensibilidad de los pol¨ªticos que insisten en tratar este asunto como un problema moral".
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