Los Doce comienzan el regateo sobre los fondos y el presupuesto de la CE
El Reino Unido quiere utilizar su semestre de presidencia de la Comunidad para diluir desde dentro las competencias de la CE. La presidencia brit¨¢nica aprovech¨® el Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores celebrado ayer en Bruselas para insistir en su rechazo al aumento de los gastos para llevar a cabo los compromisos asumidos en diciembre en la cumbre de Maastricht. El nuevo presupuesto de la CE y el reforzamiento de las ayudas a los pa¨ªses m¨¢s pobres, incluido el fondo de cohesi¨®n, pueden verse afectados por la intransigencia brit¨¢nica.
La postura brit¨¢nica, "aunque se ha encontrado en una situaci¨®n de compa?¨ªa m¨¢s escasa", en opini¨®n del ministro espa?ol, Javier Solana, amenaza con convertir la cumbre de Edimburgo en diciembre en una cita de rebajas. La propuesta de la Comisi¨®n Europea (el paquete Delors II) "es lo que est¨¢ sobre la mesa, incluido el nuevo fondo de cohesi¨®n que entrar¨¢ en vigor en los primeros meses de 1993 como se acord¨® en la cumbre de Lisboa", insisti¨® Solana.En su primera intervenci¨®n en un Consejo de Ministros de Asuntos Exteriores de la CE, el ministro espa?ol adopt¨® una postura prudente. No ocult¨®, sin embargo, que Espa?a aspira a beneficiarse con m¨¢s del 60% de los 1,3 billones de pesetas previstos incialmente para ese fondo de cohesi¨®n en cinco a?os. "Pero no me gustar¨ªa introducir m¨¢s ruido en el sistema", dijo, en alusi¨®n al malestar creado por esa exigencia en los otros tres pa¨ªses beneficiarios (Portugal, Irlanda y Grecia). El Gobierno conf¨ªa en esas ayudas destinadas a transportes y medio ambiente para poder cumplir con el objetivo fijado en el plan de convergencia de destinar un 5% del PIB a inversiones en infraestructuras entre 1993 y 1997.
El nuevo fondo de cohesi¨®n no es m¨¢s que una parte del reforzamiento de la solidaridad entre los Doce, que para los cuatro pa¨ªses menos desarrollados se traduce en una duplicaci¨®n global de las ayudas regionales que ahora reciben. El Reino Unido insiste en que no hace falta superar el 1,2% del PIB de los Doce como techo actual de gastos de la Comunidad. Delors defiende que es necesario aumentar los recursos hasta el 1,35% en 1997.
Propuesta de Delors
La diferencia est¨¢ en que, a pesar del ahorro en gastos agrarios, la congelaci¨®n del techo que plantean los brit¨¢nicos s¨®lo dar¨ªa un aumento al final de 1997 de 5.100 millones de ECU (663.000 millones de pesetas) en el presupuesto comunitario, cuando s¨®lo para la cohesi¨®n se necesita m¨¢s del doble. Delors demostr¨® ayer que las cuentas brit¨¢nicas son imposibles y que no se puede ir m¨¢s all¨¢ en el recorte agrario. "Nadie se puede imaginar que podr¨ªamos cumplir nuestros compromisos si mantenemos el techo del 1,2%", dijo.A la presidencia brit¨¢nica, indirectamente le apoyan varios pa¨ªses, mientras Italia y B¨¦lgica se niegan a revisar su contribuci¨®n por IVA, que actualmente les beneficia. El tal¨®n de Aquiles del Reino Unido es el "cheque" que obtuvo Margaret Thatcher en 1984. Varios pa¨ªses, con Alemania a la cabeza, piden revisar este acuerdo por el que Londres recupera las dos terceras partes de su saldo neto negativo con la CE. La cifra anual que le paga el resto de sus socios comunitarios supera los 300.000 millones de pesetas. Para Espa?a, seg¨²n Solana, ¨¦sta puede ser "la mejor palanca" para vencer la oposici¨®n brit¨¢nica a reforzar los fondos.
La estrategia negociadora espa?ola, despu¨¦s de la pelea casi en solitario que Felipe Gonz¨¢lez protagoniz¨® en las cumbres de Maastricht y Lisboa, parece pasar ahora por la negociaci¨®n bilateral para defender los intereses nacionales. En el nuevo fondo de cohesi¨®n no s¨®lo plantea los criterios de poblaci¨®n y superficie para benefiociarse de las ayudas, sino la capacidad de absorber en proyectos concretos la financiaci¨®n de la CE. Las modalidades del futuro reglamento es la pelea sorda con sus aliados (Portugal, Grecia e Irlanda), menos capacitados para acometer grandes inversiones.
El otro frente elegido por los brit¨¢nicos para debilitar la CE es el jur¨ªdico. En este caso, la aplicaci¨®n del principio de subsidiariedad implicar¨ªa, seg¨²n Londres, la revisi¨®n de las casi 300 directivas aprobadas para crear el mercado ¨²nico. El Reino Unido, por boca del ministro de Auntos Exteriores, Douglas Hurd, entiende que hace falta analizar si cada norma comunitaria ha sido adoptada en funci¨®n del criterio de eficacia para los ciudadanos y si, en lugar de la CE, no debe ser el Estado o una instancia regional o local quien deba asumir esas competencias.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.