Honor a Antonio Mairena
El calor de su recuerdoCante: Manuel Mairena, Jos¨¦ de la Tomasa, Jos¨¦ Menese, Jos¨¦ Merc¨¦, Fernanda y Bernarda de Utrera.
Toque: Enrique de Melchor, Pedro Pefia, Paco del Gastor. Baile: Matilde Coral y Rafael el Negro, con Chano Lobato, Romerito y Nano de Jerez al cante, y
Manolo Dom¨ªnguez al toque.
Recinto Expo, patio del Ave Mar¨ªa del monasterio de Santa Mar¨ªa,de las Cuevas. Sevilla, 2 de agosto.
Con este espect¨¢culo culmin¨® la semana de homenaje a Antonio Mairena, celebrada en Sevilla, en la que una vez m¨¢s fue discutida la figura del maestro desde distintos puntos de vista -obviamente, todos laudatorios-, y adem¨¢s fueron presentados el libro Antonio Mairena en el mundo de la seguidilla y la sole¨¢, del que son autores Luis Soler Guevara y Ram¨®n Soler D¨ªaz, y la edici¨®n en 16 discos compactosde la obra fonogr¨¢fica completa del cantaor.
El espect¨¢culo, en el marc¨® de m¨¢s prestigio de la Expo, cont¨® con la asistencia de Felipe Gonz¨¢lez, Manuel Chaves y otras personalidades, lo que indica la importancia que desde las m¨¢s altas instancias se quiso dar al homenaje en honor del cantaor que fuera distinguido como hijo predilecto de Andaluc¨ªa. Fue un espect¨¢culo al que se quiso dar empaqu¨¦ y grandeza, con artistas de alguna manera relacionados con la trayectoria art¨ªstica y la est¨¦tica cantaora del maestro, de cuyo programa al final desapareci¨® Juan Pe?a, El LebrUano.
Dignidad y frialdad
Todo se desarroll¨® de acuerdo con un meticuloso gui¨®n, lo que quiz¨¢ determin¨® que los cantaores aparecieran un tanto envarados y no se produjeran con mayor espontaneidad; o quiz¨¢ esto se debi¨® a su conciencia de la responsabilidad que afrontaban. Lo cierto es que el espect¨¢culo tuvo un tono de gran, dignidad formal, pero de una cierta frialdad en muchos momentos.
En este contexto, quien mejor librado sali¨® fue Jos¨¦ Merc¨¦; pele¨® el cante con sus habituales fuerza y desgarro y logr¨® los momentos de mayor jondura y emoci¨®n. Manuel Mairena, muy impuesto en su papel de ¨²nico d¨¦positario en activo del arte de su estirpe, logr¨® uno de los momentos culminantes en su cante por seguidillas. La ronda final de ton¨¢s por los cuatro cantaores fue otro momento estelar. Como lo fue el gran baile de Matilde Coral y Rafael el Negro, quienes volvieron a actuar despu¨¦s de cuatro a?os sin subir a un escenario. La Femanda y la Bernarda, crepusculares. El de la Tomasa y Menese, correctos. Y los guitarristas, espl¨¦ndidos, cada uno en su forma de tocar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.