Gobierno y guerrilla de Guatemala negocian sobre los derechos humanos
Guatemala cuenta de nuevo con una oportunidad para la paz con la nueva ronda de negociaciones entre Gobierno y guerrilla que se -inici¨® ayer en M¨¦xico. El respeto de los derechos humanos contin¨²a siendo el tal¨®n de Aquiles de este di¨¢logo, en el que interviene por parte del Gobierno una delegaci¨®n encabezada por el ex ministro de la Presidencia Manuel Conde, mientras la Uni¨®n Nacional Revolucionaria Guatemalteca (URNG) hace lo propio con el comandante Rodrigo Asturias, tambi¨¦n conocido como Gaspar Ilom. A pesar de las expectativas que generan cada una de estas etapas negociadoras, las diferencias entre las partes contin¨²an siendo abismales. Ante la compleja agenda de la pacificaci¨®n guatemalteca, el Gobierno de Jorge Serrano El¨ªas aborda ahora la cuesti¨®n de los derechos humanos en Guatemala, a partir de una iniciativa presentada el pasado mes de mayo por el arzobispo Rodolfo Quezada, mediador en las negociaciones.
Esta propuesta prev¨¦ garant¨ªas para los guerrilleros que depongan las armas, la creaci¨®n- de una comisi¨®n que documente las violaciones de los derechos. humanos y el fin del reclutamiento forzoso en las denominadas Patrullas de Autodefensa Civil, integradas en su mayor¨ªa por campesinos guatemaltecos y bajo el control del Ej¨¦rcito.
La reanudaci¨®n de las conversaciones no ha detenido la actividad- de la guerrilla. El pasado fin de semana fue dinamitado un puente en la carretera que une Retalhuleu y Quezaltenango, la segunda ciudad del pa¨ªs, y ayer fue saboteada una torre de suministro el¨¦ctrico en el estado de Alta Verapaz. El presidente Serrano coment¨® que a pesar de la actividad guerrillera est¨¢ dispuesto a firmar "con los ojos cerrados" la propuesta de mediaci¨®n presentada por monse?or Quezada aunque no le satisfacen determinados aspectos de la misma, informa Jos¨¦ El¨ªas desde Guatemala.
La cuesti¨®n del Ej¨¦rcito
La URNG tambi¨¦n ha cuestionado algunos aspectos de esta propuesta. Y ha hecho observaciones al respecto. Para los rebeldes, el respeto a los derechos humanos en el pa¨ªs centroamericano debe ser acompa?ado del castigo a los violadores de estos mismos derechos. Y es aqu¨ª donde aparece la espinosa cuesti¨®n del Ej¨¦rcito que, seg¨²n la guerrilla, es uno de los principales factores del drama guatemalteca.
La URNG estima obligada la depuraci¨®n de aquellos mandos castrenses involucrados en la violaci¨®n de los derechos- humanos, as¨ª como el desmantelamiento de los grupos paramilitares que existen en el pa¨ªs y que, seg¨²n los rebeldes, son igualmente responsables de la guerra no declarada que sufre Guatemala.
En esta ocasi¨®n, las delegaciones del Gobierno y de la guerrilla abordar¨¢n espec¨ªficamente el asunto de los derechos humanos, despu¨¦s de casi nueve meses en los que la negociaci¨®n estuvo empantanada.
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