Fracasa la reuni¨®n de K¨®z¨ªrev con los ministros de Exteriores b¨¢lticos

La reuni¨®n de los ministros de Exteriores de Estonia, Letonia y Lituania con su hom¨®logo ruso, Andr¨¦i K¨®zirev, termin¨® ayer en Mosc¨² en un fracaso. A pesar de las prometedoras declaraciones hechas por el titular ruso antes de las conversaciones, los representantes de las tres rep¨²blicas b¨¢lticas chocaron con una dura posici¨®n por parte de Mosc¨²."Rusia propondr¨¢ un plan que puede decidir la preparaci¨®n de una cumbre con los l¨ªderes del B¨¢ltico" y constituir "un viraJe" en las relaciones con estos pa¨ªses, hab¨ªa dicho K¨®zirev antes de entrar en la sala de negociaciones.

La propuesta rusa, sin embargo, estaba lejos de ser lo que deseaban escuchar los jefes de la diplomacia b¨¢ltica. K¨®zirev dijo que Rusia estaba dispuesta a retirar sus tropas en 1994 -Lituania pidi¨®, despu¨¦s de realizar un refer¨¦ndum, que los soldados rusos se fueran de la rep¨²blica antes de fin de a?o, y el ministro de Exteriores lituano, Algirdas Saudargas, estaba autorizado a discutir s¨®lo este plazo-, y ello solamente si se cumpl¨ªa una serie de condiciones, dif¨ªciles de aceptar.

Primero, durante el periodo de evacuaci¨®n, las tropas rusas deben gozar de un estatuto legal que les permita su "nornial funcionamiento"; segundo, en los pa¨ªses b¨¢lticos debe conservarse "temporalmente" una serie de objetivos estrat¨¦gicos; y tercero, estos pa¨ªses deben renunciar a sus pretensiones de que se les compense el da?o causado por 50 a?os de ocupaci¨®n.

Compensaciones

Mosc¨² exige compensaci¨®n por los bienes dejados en el territorio de estas rep¨²blicas despu¨¦s de la evacuaci¨®n, participaci¨®n de los pa¨ªses b¨¢lticos en la construcci¨®n de viviendas para los soldados que regresan a Rusia y garant¨ªa de libre tr¨¢nsito para las cargas militares con destino a la provincia de Kaliningrado, separada de la mayor parte del territorio ruso.

K¨®zirev tambi¨¦n exigi¨® que se modifique la legislaci¨®n que discrimina los derechos pol¨ªticos y econ¨®micos de los rusos y una clara renuncia a las pretensiones territoriales. Estonia ha pedido la devoluci¨®n de las tierras fronterizas en la provincia de Pskov, que antes de 1940 le pertenec¨ªan. Es tambi¨¦n en esta rep¨²blica donde m¨¢s se discrimina a los rusos, que representan un 30% de la poblaci¨®n: en un refer¨¦ndum realizado en junio pasado, los estonios les negaron la concesi¨®n de la ciudadan¨ªa.

K¨®zirev trat¨® de endulzar la amarga p¨ªldora hablando del "enemigo com¨²n": "El nacionalismo agresivo, que nos empuja a la polarizaci¨®n entre nuestros pueblos, a violaciones de los derechos humanos y a pretensiones territoriales"