La p¨¦rdida de Jes¨²s Iba?ez
El pasado 5 de agosto recib¨ªa un mazazo al escuchar en la radio que Jes¨²s Ib¨¢?ez acababa de fallecer en Par¨ªs. Dentro de unos d¨ªas nos ibamos a encontrar en un curso de verano en Maspalomas, codirigido por ¨¦l, sobre Cr¨ªtica del lenguaje ordinario, donde se va a hablar cr¨ªticamente de muchos de los asuntos que ¨¦l analizaba con el compromiso, el rigor y la lucidez acostumbrados. Nos deja uno de los cient¨ªficos sociales m¨¢s importantes del panorama espa?ol e intemacional implicado muy directa y solidariamente en las luchas cotidianas, simb¨®lico ideol¨®gicas y pol¨ªticas de Espa?a y del mundo. En unas ¨¦pocas en que lo que predomina es la cultura del dinero, del estatus y la distinci¨®n, Jes¨²s desde hac¨ªa muchos, muchos a?os segu¨ªa estando, segu¨ªa militando con los de abajo. Lo conozco desde hace bastante tiempo al coincidir con ¨¦l, su combativa mujer Esperanza y su hijo, profesor en la Universidad de Euskadi, en m¨²ltiples frentes. Los ¨²ltimos fueron el Manifiesto de los cien sobre la Universidad funcionarial, guardiana de la ignorancia y de los intereses corporativos donde yace el saber; la guerra del Golfo; la denuncia de la burda manipulaci¨®n pol¨ªtica del CIS; la reivindicaci¨®n del derecho de autodeterminaci¨®n; la cr¨ªtica de una izquierda espa?ola gris, sin garra e imaginaci¨®n, claudicante ante la nueva derecha, ante la degradaci¨®n y corrupci¨®n pol¨ªticas vigentes. A Santiago y Galicia acud¨ªa asiduamente. No hacia mucho me hab¨ªa mandado un trabajo para la publicaci¨®n Nuevas Formas de Poder, titulado curiosamente Tl poder de la muerte, que finalizaba de la siguiente manera: "El efecto de la verdad exige, adem¨¢s de un di¨¢logo permanente entre los sujetos, una interacci¨®n constante su etos / objetos, en espiral abierta y transfinita. Se han borrado las dos rayas abusivas: la que separa el sujeto del objeto y la que separa el sujeto de otros sujetos. La ¨¦tica de la responsabilidad en un sistema abierto exige el di¨¢logo abierto entre los sujetos y la simbiosis con los objetos... As¨ª pasamos del C¨®gito, ergo sum al Loquor, ergo sum.El poder de la muerte nunca podr¨¢ arrebatamos el testimonio, el di¨¢logo abierto con este maestro que m¨¢s que lecciones nos ha facilitado y dejado armas para luchar contra la dominaci¨®n, contra la mentira- Miguel Cancio.
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