Guillermo Endara premia a su chica con flores

Guillermo Endara ha vuelto a dejar at¨®nitos a los paname?os con una de esas frases con que el presidente sorprende para la posteridad. "Cuando los tribunales no funcionan", dijo sin inmutarse y esbozando esa sonrisa que ya cansa a sus compatriotas, "hay que tomarse la justicia por la mano". Endara no estaba m¨¢s que justificando la agresi¨®n que sufri¨® el viernes 7 la periodista Julia Regales, directora de la revista Momento, que fue ara?ada, tirada de los pelos y golpeada por la alcaldesa de Panam¨¢, Omaira Correa. Si hace unos meses era la joven y rebelde Ana Mae D¨ªaz de Endara, primera dama del pa¨ªs, la que con sus meteduras de pata se hab¨ªa ganado la enemistad de casi todos los sectores sociales de Panam¨¢, ahora le ha salido una competidora: la alcaldesa Correa, organizadora del reciente homenaje popular a George Bush, que tuvo que suspenderse a los pocos segundos porque los gases lacrim¨®genos de los antidisturbios se volvieron contra la tribuna.Omaira Correa, de 50 a?os, era en sus a?os mozos una entusiasta de los militares torrijistas e ¨ªncluso de la extinta URSS. El tiempo la ha cambiado, y en los ¨²ltimos a?os de Manuel Antonio Noriega, con el acta de legisladora en el bolso, se march¨® a Miami y all¨ª mont¨® una radio, desde donde dirigi¨® la resistencia. A su vuelta a Panam¨¢ coquete¨® con Endara, recuper¨® 60.000 d¨®lares de sueldos atrasados como legisladora del antiguo r¨¦gimen y esper¨® a que la Democracia, Cristiana rompiera con el presidente para ocupar el sill¨®n municipal que dejaba el primer alcalde tras el Gobierno de Noriega, Guillermo Cochez. Una de sus primeras decisiones fue nombrar a la primera dama, Ana Mae, como abanderada del ¨²ltimo carnaval, haci¨¦ndola desfilar en un caballo y vestida de apache. Todo un espect¨¢culo que fue m¨¢s all¨¢ del rid¨ªculo. Endara no lo vio as¨ª y sigui¨® cautivado por su alcaldesa, que es de las pocas personas adictas que le quedan ya dentro del pa¨ªs. La revista Momento descubri¨® recientemente supuestas irregularidades en una cuenta especial de la alcaldesa y salt¨® el esc¨¢ndalo. Correa, que dirige tambi¨¦n un programa de radio matinal, se fue al despacho de la directora, se encerr¨® con ella y, en medio del batiboleo, la ai redi¨® a la vieja usanza. Luego se march¨® a su casa y tuvo que soportar una retah¨ªla de editoriales period¨ªsticos que exig¨ªan su dimisi¨®n. Endara no s¨®lo la reconfirm¨® en su cargo, sino que le envi¨® un ramo de flores por su osad¨ªa. El caso est¨¢ en los tribunales, y m¨¢s de un juez ya ha advertido que habr¨¢ que demostrarle al presidente que "funcionamos, porque ning¨²n cargo p¨²blico puede tomarse la justicia por su mano".-