Administra y vencer¨¢s

En el mundo de la m¨²sica pop los buenos siempre ganan. Parece que lo hacen porque s¨ª, sin necesidad de dar una sola explicaci¨®n, sin hacer concesiones. Sin ense?ar sus cartas. Pero no es cierto. Los buenos ganan siempre porque son ellos quienes escriben su propio gui¨®n. Porque tienen la sart¨¦n por el mango. Y Mecano, el grupo pop espa?ol m¨¢s importante de los ¨²ltimos anos, no es una excepci¨®n a esta regla. El primero de sus tres conciertos en Madrid fue una demostraci¨®n de saber y poder, un derroche de medios y canciones, y adem¨¢s, toda una sabia lecci¨®n de c¨®mo administrar una renta.S¨®lo un imprevisto pod¨ªa hacer fracasar la velada. Algo como, por ejemplo, un fallo en la voz de Ana Torroja. Pero ni con ¨¦sas. Gravemente resquebrajada por una laringitis, la garganta de la parte femenina de Mecano supo aguantar el tir¨®n. Dosific¨® su renta vocal, ayudada por el resto del grupo, y logr¨® terminar a trompicones un recital largo y denso. Sobrevivi¨®.

Dos horas y media de m¨²sica es mucho tiempo para una cantante rota. Pero la Torroja aguant¨® el chaparr¨®n sin titubeos, con una profesionalidad fuera de toda duda y con evidentes ganas de complacer al p¨²blico de su ciudad. A los diez minutos de comenzar el concierto, las estrofas a capella del tema Aire la dejaban en evidencia. Ni se inmut¨®. Dos horas m¨¢s tarde, cuando defendi¨® El pe¨®n del rey de negras, el enorme esfuerzo realizado hac¨ªa que su voz apenas respondiese. Ni un atisbo de duda. A¨²n pudo atacar un popurr¨ª final que termin¨® de enloquecer a las 17.000 personas reunidas en Las Ventas.

Una estructura mod¨¦lica

Mecano es una empresa con una estructura mod¨¦lica. Nacho y Jos¨¦ Mar¨ªa Cano escriben los ¨¦xitos. Ana Torroja les da vida. En directo, este proceso es a¨²n m¨¢s evidente que en sus grabaciones. Pese a sus problemas f¨ªsicos, Ana carg¨® sobre sus espaldas con todo el peso del espect¨¢culo. Y supo resolver ante un p¨²blico amplio y predispuesto al aplauso f¨¢cil. "Bocadillos de Mecano", canturreaban los vendedores ante las numerosas familias.El montaje que el grupo present¨® resulta impactante. Tanto que llega el momento en que se puede perder el contacto visual directo con el artista. ?D¨®nde est¨¢n los Mecano?, se preguntaban algunos. Nacho puede metamorfosearse. Ana es capaz de disfrazarse de Loles Le¨®n para cantar Haway Bombay. Jos¨¦ Mar¨ªa, mucho m¨¢s prudente, se convierte en el personaje introvertido que necesita todo gran grupo. Todo sirve. Los Mecano de los noventa est¨¢n definitivamente por encima del bien y el mal.