El Gobierno prev¨¦ que el paro crecer¨¢ hasta cerca de tres millones en 1993

El Presupuesto del Estado que elabora el Gobierno para 1993 refleja con toda crudeza el creciente deterioro que sufren la econom¨ªa espa?ola y la de todo el mundo occidental. Econom¨ªa prev¨¦ un raqu¨ªtico crecimiento econ¨®mico del 0,7%, una ca¨ªda de la inversi¨®n del 1,2% y un aumento del paro en 500.000 personas, que lo situar¨ªa en la fat¨ªdica cifra de casi tres millones, que ya se registr¨® en Espa?a entre 1985 y 1987, los a?os m¨¢s dram¨¢ticos para el mundo laboral.

Todas estas magnitudes reflejan una divergencia total con respecto a las previsiones del plan de convergencia, que preve¨ªa un crecimiento del 3,3%, un aumento de la inversi¨®n del, 5,1% y una disminuci¨®n del paro en 50.000 personas. Tambi¨¦n se agravan las perspectivas de la inflaci¨®n. De una previsi¨®n del 4,6% inicial se pasa al 5,2%. Este dato no re fleja todav¨ªa el impacto de la de valuaci¨®n de la peseta del 5% -aunque la depreciaci¨®n real es ya del 10%-, que tendr¨¢ una fuerte repercusi¨®n en los precios de otro punto y medio. Los presupuestos arrancan con una voluntad de contener el gasto p¨²blico, para el que se prev¨¦ un crecimiento del 3,9% respecto al gasto efectivo del presente ejercicio. Los grandes sacrificados ser¨¢n los funcionarios, que sufrir¨¢n pr¨¢cticamente una congelaci¨®n de sus salarios, ya que la previsi¨®n de gasto en el cap¨ªtulo de personal registra una disminuci¨®n del 2,6%.Sin embargo, el Gobierno contempla una partida adici¨®n al para cumplir el compromiso de garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo por un mayor crecimiento de la inflaci¨®n. Los departamentos que sufrir¨¢n m¨¢s el recorte son: Defensa, 5,'7%; Industria, 6,3%, y gastos diversos, 20%. El mayor crecimiento corresponde a deuda p¨²blica, 21,6%; clases pasivas, 7,9%; Trabajo y Seguridad Social, 10,5%, y Sanidad, 12,7%.

El mantenimiento de los objetivos de d¨¦ficit p¨²blico traer¨¢ consigo una fuerte contenci¨®n del gasto p¨²blico, ya que las previsiones de ingresos sufrir¨¢n un gran recorte al disminuir la actividad econ¨®mica. La ca¨ªda de los beneficios empresariales supone tambi¨¦n una reducci¨®n en la recaudaci¨®n del impuesto de sociedades.

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