Medio centenar de Diputados conservadores forman un grupo de presi¨®n anticomunitario en Westminster

ENRIC GONZ?LEZEl primer ministro brit¨¢nico, John Major, se enfrentar¨¢ hoy a una aut¨¦ntica guerra de trincheras en la C¨¢mara de los Comunes, seg¨²n varios diputados notoriamente euroesc¨¦pticos. Un amplio sector de los conservadores quiere aprovechar la sesi¨®n extraordinaria de esta tarde para arrancar de Major una declaraci¨®n inequ¨ªvoca contra el Sistema Monetario Europeo (SME) y contra el Tratado de Maastricht.

Al primer ministro le ser¨¢ dif¨ªcil mantener la posici¨®n ambigua de los ¨²ltimos d¨ªas, acosado por los tories euroesc¨¦pticos, de un lado, y por el Partido Laborista, del otro.

El debate de hoy supondr¨¢ el estreno parlamentario de John Smith como jefe de las filas laboristas, y el de un grupo de presi¨®n anticomunitaria formado ayer por unos 50 diputados conservadores de los 336 que hay en un parlamento de 650. Tambi¨¦n marcar¨¢ el fin del estado de gracia de John Major tras la formidable victoria electoral del 9 de abril. El debate fue convocado el mi¨¦rcoles pasado, tras la devaluaci¨®n de la libra, y girar¨¢ en torno a la crisis monetaria.

John Major, agobiado por las divisiones en su Gobierno, la rebeli¨®n en su partido y la irritaci¨®n de sus socios en la Comunidad Europea, se personar¨¢ en los Comunes con un problema adicional: David Mellor. El ministro del Patrimonio, amigo personal de Major, se encuentra al borde de la dimisi¨®n tras el esc¨¢ndalo por sus relaciones extramatrimoniales con la actriz espa?ola Antonia de Sancha y por su amistad con la hija de un dirigente de la OLP palestina.

La ca¨ªda de Mellor, exigida por el presidente del Partido Conservador, Norman Fowler, supondr¨ªa la primera baja en un Gabinete formado hace seis meses, y en el que otra cartera, la econ¨®mica de Norman Lamont, pende de un hilo tras la devaluaci¨®n. El enfrentamiento entre europe¨ªstas y euroesc¨¦pticos en el Gobierno se recrudecer¨ªa en la disputa por ocupar la silla vac¨ªa. La C¨¢mara de los Lores, convertida en reducto de la era thatcherista, celebrar¨¢ un debate simult¨¢neo al de los Comunes sobre la crisis monetaria. Margaret Thatcher, Norman Tebbit y otros ex dirigentes tories aprovechar¨¢n la ocasi¨®n para arengar a las bases conservadoras y fomentar la revuelta anticomunitaria, con vistas a la conferencia del partido, convocada para principios de octubre.