Paso a dos en San Blas

El Pozo del T¨ªo Raimundo, Orcasitas, La Elipa, San Blas. Son nombres que chirr¨ªan al hablar de tut¨²s, mallas y zapatillas de danza. El curso del 92 puede ser recordado por 14.000 alumnos de colegios madrile?os como el a?o en el que descubrieron el ballet. Hasta el pr¨®ximo 18 de diciembre se suceder¨¢n las representaciones educativas en los centros culturales de los distritos.

Mientras la mitad de los ciudadanos considera que los actos de la capital cultural europea pasan con m¨¢s, pena que gloria, seg¨²n una encuesta, el consorcio organizador del Madrid 92 asegura que el programa Un nuevo p¨²blico para la danza est¨¢ siendo un ¨¦xito.Para salir de dudas, dos redactores de este peri¨®dico se fueron a San Blas a ver el espect¨¢culo junto con dos centenares de ni?os.

Casi todos los chavales prefieren la danza a ritmo del rock, aunque a muchos les deslumbran tambi¨¦n las evoluciones de los bailarines cl¨¢sicos. "Es la primera vez que venimos al ballet", reconoc¨ªan encantados los escolares que presenciaron la sesi¨®n matinal de danza en la ma?ana del pasado mi¨¦rcoles en el sal¨®n de actos del Centro Cultural Antonio Machado, en San Blas.

"?Sab¨¦is lo que es un core¨®grafo?", preguntaba la presentadora del ballet de Luis Fuente, la bailarina colombiana Zelma Cubillo. "Noooooo", respondieron 200 gargantas chillonas. Las compa?¨ªas preparan antes de las representaciones unos materiales did¨¢cticos que se remiten a los colegios para preparar a los ni?os. Al final de cada espect¨¢culo, los alumnos formulan preguntas a los bailarines, y, una vez en clase, preparan redacciones y dibujos para plasmar sus impresiones sobre el mundo de la danza.

Boquiabiertos

El pasado mi¨¦rcoles, la Sinfon¨ªa en C, de Goerges Bizet, acall¨® por el momento a los escolares de San Blas y Ciudad Lineal. Las luces, las mallas rosas y blancas dejaron a m¨¢s de uno boquiabierto. Los "?oh!, ?hala!" obtuvieron una inmediata respuesta -calla, ni?o"- por parte de los maestros. La algarab¨ªa apenas dejaba o¨ªr la m¨²sica grabada. La campa?a de espect¨¢culos de danza para los escolares en 1992 va a costar un total de 24 millones de pesetas.Los alumnos de un colegio de integraci¨®n gitana de Orcasitas se aburrieron de lo lindo cuando los llevaron a un espect¨¢culo de danza cl¨¢sica. "Eso no es baile ni es na", le dijeron a la coordinadora del programa Un nuevo p¨²blico para la danza, la bailarina Maite Prieto. Pero unas semanas m¨¢s tarde se les invit¨® a la representaci¨®n de la compa?¨ªa flamenca de Tom¨¢s de Madrid. "Estaban como locos; todos quer¨ªan ir al camerino juntos a saludar a los artistas", recuerda Maite Prieto.

En el Centro Cultural Antonio Machado, los escolares tambi¨¦n estaban algo alterados. "Se?o, no tengo sitio". "?Puedo ir al servicio?". "Ag¨¢chate, que no veo". La cantinela no cesa. Mientras, en el escenario, Zelma Cubillo explicaba marcando el ritmo qu¨¦ es el paso a dos estilizado:

-Y un, dos, tres... un, dos, tres...

-Y cuaaatro, y ciiinco, y seeeis... -replicaban los aplicados alumnos mientras Zelma meneaba la cabeza. Luis Fuente, de 46 a?os, dirige la compa?¨ªa y la coreograf¨ªa de casi todas sus interpretaciones.En San Blas, Arnold Schwarzenegger se hubiese negado a rodar Poli de guarder¨ªa ante semejante algarab¨ªa infantil. Afortunadamente, el espect¨¢culo est¨¢ estudiado. La m¨²sica de David Byrne deja clavados en las butacas a los ni?os. Una decena de bailarines ejecutaba una danza al son del rock, aunque con t¨¦cnica cl¨¢sica. No era Broadway. Aun as¨ª, hubo palmas, dos vueltas al escenario y ovaci¨®n de gala. Pero el a?o que viene Madrid dejar¨¢ de ser capital cultural.