Yo fui director de 'Villa de Madrid'
El periodista que dirigi¨® Villa de Madrid, en un homenaje a los que lo hicieron posible, lamenta la escasa repercusi¨®n que ha tenido el cierre de esta publicaci¨®n municipal; la explicaci¨®n que se ha dado.a su desaparici¨®n -el ahorro de 180 millones en las arcas municipales- y las cr¨ªticas sobre su utilizaci¨®n con fines pol¨ªticos.
No ha merecido ni una sola columna. No ha habido ninguna manifestaci¨®n de protesta en nombre de la tan invocada libertad de expresi¨®n. S¨®lo cuatro l¨ªneas escritas en alg¨²n diario y un peque?o reportaje -gracias, Telemadrid- en la televisi¨®n local.Villa de Madrid, el ¨²nico peri¨®dico que llegaba a miles de madrile?os, ha muerto sin tener siquiera ese m¨ªnimo reconocimiento que a lo largo de su azarosa vida se hab¨ªa ganado. Villa de Madrid se ha ido sin haber merecido el recuerdo de, al menos, quienes un d¨ªa colaboraron en sus p¨¢ginas y acudieron a su Redacci¨®n en demanda de ayuda y de espacio. Ha muerto como dicen que mueren algunos h¨¦roes: ignorado y en olvido. Tal vez porque Villa de Madrid ten¨ªa la dignidad de los que dieron siempre la cara por los amigos y de quienes prefieren un ocaso humilde y silencioso a un paneg¨ªrico maravilloso y falso.
Independencia
En mi curr¨ªculo profesional consta que fui director de Villa de Madrid. Fue mi mayor compensaci¨®n en el tiempo en que ocup¨¦ la jefatura de prensa en el Ayuntamiento. S¨¦ que para otros directores tambi¨¦n lo fue. Y s¨¦ que todos, independientemente de la ideolog¨ªa de quienes gobernaban, intentaron hacer el peri¨®dico m¨¢s respetuoso y respetado para y por millares de madrile?os. Porque no es verdad que Villa de Madrid fuera un instrumento pol¨ªtico. Quienes as¨ª lo vieron s¨®lo demostraron su incapacidad para admitir la independencia de los dem¨¢s. Yo fui director de Villa de Madrid con Juan Barranco como alcalde. Tengo a orgullo haber trabajado con alguien que respet¨® mi no pertenencia al PSOE y que acept¨® -incluso con alguna cr¨ªtica interna- que, durante su mandato, en el peri¨®dico primara, por encima de la pol¨ªtica, la profesionalidad de quienes trabaj¨¢bamos en ¨¦l. A sus p¨¢ginas me remito. Si en alg¨²n caso ha habido alg¨²n desliz partidista, queda sobradamente compensado con el aire de libertad que tan generosamente recorri¨® sus p¨¢ginas.En Villa de Madrid, hay que reconocerlo, encontraron cobijo plumas que hab¨ªan sido injustamente marginadas de los peri¨®dicos llamados serios. En este cap¨ªtulo hay que citar con orgullo -a Manuel Pilares, Jos¨¦ Antonio Novais, Manuel Conde y tantos otros que han dejado escritas p¨¢ginas glo riosas del periodismo, la literatura o el arte. Era un peri¨®dico abierto y plural en el que han compartido cabecera gentes de muy distinta ideolog¨ªa y que ha servido para que ensayaran sus primeras armas muchos que hoy son reconocidos como reputados articulistas.
Dicen que cierran Villa de Madrid por problemas presupuestarios. Son los que no admiten otra rentabilidad que la econ¨®mica. Dicen que fue un instrumento pol¨ªtico. Villa de Madrid fue, ante todo, veh¨ªculo de ideas, un medio de comunicaci¨®n hecho sin demasiados medios por aut¨¦nticos profesionales. Como Fernando Fern¨¢ndez Sanz, uno de los inventores de lo que hoy es el periodismo econ¨®mico. Cuando en este pa¨ªs las secciones de econom¨ªa s¨®lo recog¨ªan los remitidos de las juntas generales, Fernando ya andaba contando c¨®mo y por qu¨¦ se mov¨ªan las empresas y las extra?as razones que el dinero introduc¨ªa en la pol¨ªtica. Fern¨¢ndez Sanz ha estado estos ¨²ltimos a?os en Villa de Madrid, dej¨¢ndose la vista y las horas, dando lecciones de aut¨¦ntico periodismo. Y Mariajo, Carmen, Alejandra, Anabel, Mariano, Juanito, Emilio, Pilar..., apenas media docena de nombres que hac¨ªan posible que Villa de
Madrid fuera mucho m¨¢s que un bolet¨ªn municipal. Habr¨¢, al menos, que dejar constancia de sus nombres y de su profesionalidad.
Hoy el Partido Popular cierra Villa de Madrid. Cuesta creer que gentes como Jos¨¦ Mar¨ªa ?lvarez del Manzano, que demostr¨® siempre un exquisito respeto por Villa de Madrid, o como Carlos L¨®pez Collado, que tantas horas dedic¨® a apoyar cr¨ªticamente su publicaci¨®n, pongan fin a un instrumento de comunicaci¨®n. S¨®lo puede explicarse como un error. O por imposici¨®n de otros. ?Qui¨¦n ha mandado cerrarlo? Porque el cierre de Villa de Madrid es mucho m¨¢s que el cierre de un peri¨®dico. Es el cierre de una ilusi¨®n. Es un ataque sin sentido -por eso mucho m¨¢s est¨²pido- a la libertad de expresi¨®n. Cuando se cierra un peri¨®dico, aunque sea municipal, se est¨¢ cerrando el derecho a saber. El derecho a expresar opiniones y a rebatirlas.
Otros gestores
Ahora alguien explicar¨¢ que no hay problema. Que Villa de Madrid se cierra, pero que sus redactores ser¨¢n recolocados dentro del propio Ayuntamiento. Que con esta medida se ahorran 180 millones de pesetas. Todo ser¨¢ perfecto. Son las explicaciones de quienes todo lo miden en dinero y de quienes nunca han tenido en cuenta las necesidades de los dem¨¢s. All¨¢ ellos. Son tambi¨¦n los que dicen que ¨¦ste era un peri¨®dico de Tierno Galv¨¢n. Bueno. Tampoco es tan malo. ?O es que hay que matar las obras para matar el recuerdo? Yo creo que Villa de Madrid era mucho m¨¢s. Y que se hubiera merecido otros gestores. Los que en alg¨²n momento de nuestra vida profesional hemos pasado por Villa de Madrid sabemos,que, de verdad, de verdad, lo que han cerrado era s¨®lo un peri¨®dico de Madrid.Y un peri¨®dico, adem¨¢s, que iba fundamentalmente dirigido a aquellos que, en muchas ocasiones, s¨®lo ten¨ªan al humilde Villa de Madrid como punto de uni¨®n con la informaci¨®n. Era su peri¨®dico. No ten¨ªan otro. Ahora ya no tienen nada.
A lo peor, por eso lo han cerrado.
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