El mundo no se acaba
El panorama que nos est¨¢n pintando pol¨ªticos y medios de difusi¨®n es tan negro que en el ya cercano 1993 me temo que volveremos a ver los abrigos vueltos, remendados los cuellos de las camisas, tomates en los calcetines, agujeros en las suelas de los zapatos, nos quedaremos sin postre, rebrotar¨¢n los saba?ones... Creo que alguien se est¨¢ excediendo en castastrofismo. Hay que decir a la gente joven que el mundo no se acaba por tener que prescindir de cosas y vivir con alguna austeridad. Los que hemos conocido una guerra civil, una dur¨ªsima posguerra y los efectos de la Segunda Guerra Mundial sabemos bien que las vacas flacas son superables. No es positivo dramatizar demasiado, aunque el futuro sea preocupante.Y aunque resulte que ahora no somos competitivos en nada, despu¨¦s de convencernos- de, lo contrario. Ni en la industria, ni en la agricultura, ni en servicios... ?Qu¨¦ ha pasado con la modernidad? ?En qu¨¦ ha quedado? ?En que nuestros ni?os ya no se llaman Ceferino, Teodoro o Marcelina sino Vanesa, Igor o Nohem¨ª? Rid¨ªcula revoluci¨®n la nuestra.- Agust¨ªn Olivera Mart¨ªn.
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