Problemas con el ego

Ahora que se cumple una d¨¦cada (primera y ¨²ltima, espero) del socialismo en el poder se me vienen a la cabeza una y otra vez las im¨¢genes del Felipe de Suresnes te?idas de esa aureola de ferviente idealismo iconoclasta que por aquel entonces presid¨ªa su entorno. Contemplo tras 10 a?os en el cenit, y no pocas canas, a este Felipe de 1992, y algo en mi interior me obliga a reflexionar, mientras observo apesadumbrado un pa¨ªs desconcertado y empobrecido saliendo a duras penas de la resaca que los fastos de este a?o le han dejado. Realmente creo que este hombre tiene un grave problema con su ego. ?Qu¨¦ pensar de la megaloman¨ªa desatada que por estos reinos ¨²ltimamente campea invicta devorando cualquier plan de austeridad que reflote un fr¨¢gil erario ya por dem¨¢s exhausto? M¨¢s que cultivar esa tan querida imagen de estadista europeo queriendo atribuir a este pa¨ªs una relevancia pol¨ªtica y/o econ¨®mica que en la pr¨¢ctica no tiene en el concierto de las naciones, lo m¨¢s honesto ser¨ªa dedicar esos ingentes esfuerzos en atender las muchas y graves necesidades que los ciudadanos de su pa¨ªs (s¨ª, acu¨¦rdese, aquellos que un d¨ªa le votaron para que cambiara sus vidas) est¨¢n reclamando desde todos los ¨¢mbitos.-