Kohl reafirma en el congreso de su partido, el modelo comunitario de Maastricht

El segundo d¨ªa del congreso de la Uni¨®n Cristiana Democr¨¢tica (CDU) en D¨¹sseldorf ofreci¨® una clara visi¨®n del dilema pol¨ªtico al que, desde la unificaci¨®n, se enfrenta la clase pol¨ªtica alemana: ?Una Alemania europea o una Europa alemana?. La s¨ªntesis, seg¨²n el canciller Helmut Kohl, pasa por la reafirmaci¨®n del modelo comunitario acordado en Maastricht, que supone la aplicaci¨®n de los criterios econ¨®micos y financieros germanos, y por la consolidaci¨®n del eje Par¨ªs Bonn como columna vertebral del proyecto de Uni¨®n Europea.

"Estamos en 1992, no en 1902", dijo ayer Kohl ante el millar de delegados democristianos, rechazando categ¨®ricamente las cr¨ªticas a una Alemania "demasiado poderosa y ego¨ªsta" para el bien de Europa. El grueso del discurso del canciller, dedicado a la unidad europea, se dirigi¨® -aunque sin citarlo- contra el Reino Unido y "quienes argumentan en favor de anticuadas coaliciones de equilibrio de poder destinadas a contener el expansionismo alem¨¢n"."Escucho comentarios sobre que nuestros lazos con Francia son demasiado fuertes, de que hay un eje Par¨ªs-Bonn, de que estamos construyendo una hegemon¨ªa francoalemana", dijo Kohl. Y a?adi¨®: "Cuando las cosas no funcionan acusan a Alemania de no estar a la altura de sus obligaciones, pero prefiero ser vilipendiado por esto a que alguien pueda acusarnos de no haber aprendido las lecciones de la historia y dejar que esta vieja enemistad contin¨²e". El canciller, sin embargo, matiz¨® que est¨¢ completamente en contra de "aislar a cualquier miembro de la CE".

Kohl repiti¨® su apoyo incondicional al Tratado de Maastricht, record¨® que est¨¢ ya en proceso de ratificaci¨®n y dijo que si no llega a entrar en vigor "pasar¨¢ al menos una generaci¨®n hasta que tengamos una nueva oportunidad" y los europeos correremos el riesgo "de que el tr¨¢gico pasado de Europa vuelva a atraparnos. Nadie debe creer que el espectro del nacionalismo est¨¢ muerto o que s¨®lo existe en los Balcanes".

En el ¨¢mbito financiero y monetario, Kohl repiti¨® su apoyo a la moneda ¨²nica europea. Dijo que no se "relajar¨¢n" los estrictos criterios fijados en Maastricht para la Uni¨®n Monetaria. Esta insistencia en la extensi¨®n del modelo antinflacionario del Bundesbank, al que se acusa ahora de provocar las turbulencias en el Sistema Monetario Europeo, vino subrayada por la abierta defensa que hizo Kohl de que la futura pol¨ªtica monetaria europea se dirija desde Alemania. Para el canciller, el Tratado de Maastricht es tambi¨¦n la mejor herramienta para solucionar el problema de los inmigrantes y de la violencia neonazi que ha desatado en Alemania su presencia masiva.