La tienda de la esquina de Arkansas

?Vale la experiencia en el manejo de la tienda de la esquina para dirigir El Corte Ingl¨¦s? Algo as¨ª pregunt¨® -no mencionando a las famosas tiendas espa?olas, por supuesto, sino a los grandes almacenes Wal-Mart- Ross Perot en el ¨²ltimo de los debates electorales, poniendo en duda que la gesti¨®n de Bill Clinton como gobernador de Arkansas fuese m¨¦rito suficiente para llegar a la Casa Blanca. George Bush responde, desde luego, que no, y, adem¨¢s, mantiene que el trabajo de Clinton durante sus 12 a?os al frente del Gobierno de su Estado natal es negativo.

El candidato dem¨®crata asegura, naturalmente, que su labor fue un ¨¦xito y que su experiencia en Arkansas le ha permitido conocer los secretos de una Administraci¨®n apegada a las necesidades de la gente sencilla de un Estado pobre.Pero ?cu¨¢l es la verdad? ?C¨®mo lo ha hecho Clinton en Arkansas? ?Y qu¨¦ ha aprendido all¨ª que pueda aplicar despu¨¦s al Gobierno de la naci¨®n m¨¢s poderosa del mundo? El balance, seg¨²n la fuente que se escuche, es contradictorio: un considerable ¨¦xito en lo econ¨®mico, pero sin sacar a Arkansas del pozo de retraso en el que se encuentra en relaci¨®n al resto de los Estados del pa¨ªs; una mejora en las condiciones de vida, pero al precio de un retroceso en algunos otros aspectos, como el ecol¨®gico; un avance en las relaciones entre razas, pero sin haber conseguido aprobar una ley de derechos civiles.

Arkansas est¨¢ hoy, seg¨²n el promedio de opiniones, mejor que hace 12 a?os, pero todav¨ªa situada entre los cinco ¨²ltimos Estados en cuanto al nivel de vida de su poblaci¨®n.

"Clinton ha conseguido un crecimiento del empleo superior a la media nacional, mientras el porcentaje de gasto p¨²blico y de impuestos en proporci¨®n a los ingresos ha aumentado muy poco. La mejora de las condiciones econ¨®micas ha sido particularmente significativa en los ¨²ltimos cuatro a?os, precisamente cuando el presidente Bush dirig¨ªa un descenso a nivel nacional", afirma el diario The Wall Street Journal.

"Sus cr¨ªticos dicen que ten¨ªa un programa para el progreso de Arkansas que nunca puso realmente en pr¨¢ctica; un programa para proteger el medio ambiente frente a la expansi¨®n econ¨®mica, para promover un reparto m¨¢s justo de la carga impositiva, para ayudar a las minor¨ªas, que no complet¨®", dice Ken Bode, que investig¨® la trayectoria de Clinton para la cadena CNN.

"Clinton no ha hecho grandes avances en la mejora de los derechos civiles ni del medio ambiente. En cuanto a la estructura de impuestos, ha sido un fracaso", opina Paul Greenberg, responsable de las p¨¢ginas editoriales del peri¨®dico conservador Arkansas Democrat-Gazette, un declarado enemigo del gobernador.

Gobernador m¨¢s joven

Bill Clinton gan¨® por primera vez las elecciones en su Estado -situado entonces en el puesto 490 del ranking de los 50 Estados del pa¨ªs- a los 32 a?os, lo que le permiti¨® ser el gobernador m¨¢s joven de Estados Unidos. Dos a?os m¨¢s tarde se convirti¨® en el ex gobernador m¨¢s joven de la naci¨®n, y otros dos a?os despu¨¦s volvi¨® al mismo cargo para seguir en ¨¦l hasta la actualidad.

En su primer mandato, Bill Clinton era un muchacho lleno de ideales y ambiciones que choc¨® frontalmente con los intereses creados de un Estado peque?o donde todo el mundo se conoce por su nombre, un peque?o Estado que nunca comprendi¨® que la esposa del gobernador, Hillary, se negase a cumplir con la tradici¨®n de adoptar el apellido del esposo.

Clinton siempre ha sostenido que perdi¨® las elecciones en 1980 porque se le hab¨ªa ocurrido subir los impuestos sobre los autom¨®viles un poco antes de la campa?a, pero otros creen que buena parte de la culpa de su fracaso la tuvo su amigo Jimmy Carter, que entonces era presidente de Estados Unidos.

Florida se hab¨ªa llenado en esos a?os de refugiados cubanos llegados en masa durante la Operaci¨®n Mariel, y Carter le pidi¨® a Clinton un espacio en el Estado de Arkansas para albergar a los cubanos que no cab¨ªan en Miami. Los cubanos, que no hab¨ªan hecho el viaje para vivir tan lejos de sus paisanos, se echaron a las calles para protestar y forzaron la intervenci¨®n de la Guardia Nacional. Los votantes culparon a Clinton por no haber rechazado la demanda de Carter.

Bill Clinton aprendi¨® mucho de esa derrota. Cuando volvi¨® al Gobierno en 1982, era ya un pragm¨¢tico y un conciliador. "Se le ve¨ªa mucho m¨¢s inclinado a no apostar por causas perdidas y a tender puentes a sus enemigos", afirma Bode. Hillary pas¨® a llamarse Clinton y fue colocada al frente de un programa de reestructuraci¨®n educativa que le report¨® al gobernador, tal vez, el mayor ¨¦xito de su gesti¨®n.

Clinton se reconcili¨® con la clase media y no volvi¨® a subir los impuestos de forma significativa. El gobernador ha aplicado en los ¨²ltimos a?os la misma estrategia de impuestos para los ricos e inversi¨®n para abrir puestos de trabajo que hoy propone para la presidencia de Estados Unidos. Sus resultados fueron muy buenos en ese terreno.

El conjunto de gobernadores de todo el pa¨ªs eligi¨® a Clinton como el mejor en el puesto y su nombre comenz¨® a sonar como claro presidenciable. La tasa de desempleo en Arkansas es inferior a la nacional, y el ¨ªndice de crecimiento, superior al del conjunto del pa¨ªs. Entre sus ¨¦xitos, el candidato dem¨®crata suele mencionar el hecho de que su Gobierno siempre tuvo presupuestos equilibrados, sin d¨¦ficit p¨²blico.

La gesti¨®n econ¨®mica tuvo tambi¨¦n sus lagunas. Clinton otorg¨® demasiadas facilidades a una poderosa empresa de pollos que fue uno de los grandes motores del desarrollo del Estado. De hecho, uno de cada 12 trabajadores de Arkansas est¨¢ empleado por la industria av¨ªcola, que, adem¨¢s de beneficios, cre¨® productos contaminantes que afectaron peligrosamente a los r¨ªos del Estado.

Apoyo de los negros

Otra de las cr¨ªticas contra Clinton es que su Estado es uno de los dos en todo el pa¨ªs que no tiene una ley de derechos civiles. El gobernador siempre ha explicado que durante su mandato no se ha llegado a ese tipo de legislaci¨®n porque ¨¦l se neg¨® a aceptar las condiciones del Congreso.

Bill Clinton ha sido, al mismo tiempo, el gobernador que m¨¢s mujeres y negros ha nombrado para puestos de responsabilidad en toda la historia del Estado. Las relaciones entre el candidato dem¨®crata y la poblaci¨®n negra son impecables, a juzgar por las encuestas, que dan a Clinton un enorme respaldo popular entre ese sector de la poblaci¨®n.

"Bill Clinton", dice Bode, "ha convertido a sus enemigos en amigos, ha conseguido grandes resultados en algunos aspectos de su programa y ha marcado una gran diferencia en eso. Las cr¨ªticas contra ¨¦l no son por lo que ha hecho, sino por lo que prometi¨® que har¨ªa y no hizo".