Madrid y los arquitectos
El pasado d¨ªa 8 se publicaban en ese peri¨®dico dos cartas al director sobre las que quiero hacer algunas precisiones, por lo que ruego la publicaci¨®n de esta m¨ªa.Primera referencia. La reforma del Bernab¨¦u, de Margarita Dur¨¢n, Madrid.
Absolutamente de acuerdo con cuanto hace referencia a limpieza y pintadas. No obstante, quiero precisar otros hechos. No se puede aceptar que, fr¨ªvolamente, se ponga en duda la ¨¦tica profesional del Colegio de Arquitectos, que nada tiene que ver en el asunto, ya que se ha limitado a cumplir su misi¨®n deontol¨®gicamente. El primer alcalde al que Estudio Lamela present¨® el actual proyecto fue Juan Barranco, quien con sus equipos empezaron la favorable tramitaci¨®n del expediente, de conformidad con la Comunidad Aut¨®noma de Madrid, al creer todos ellos en la legalidad y conveniencia del proyecto. Despu¨¦s, CDS y PP han seguido el camino iniciado por los equipos anteriores. Ninguna de las cuatro torres de accesos, o cilindros, invaden calzada alguna, seg¨²n la nueva alineaci¨®n. Se han cumplido rigurosamente y se siguen cumpliendo todas las normas urban¨ªsticas, sin que nadie tenga patente de corso. Todo ello es perfectamente comprobable y, por supuesto, m¨¢s justo que la carta referida.
Segunda referencia. Chamber¨ª, de Fernando Santaolalla y 445 firmas m¨¢s.
Hace una acertada referencia al proyecto de remodelaci¨®n de la plaza de Chamber¨ª, del cual FCC y Estudio Lamela presentaron una soluci¨®n, muy acorde con el esp¨ªritu de tal carta, que nosotros tambi¨¦n podr¨ªamos haber firmado. Por ello, apoyo los conceptos manejados en cuanto al mal fin que tiene la disociaci¨®n radical de circulaciones peatonales y vehiculares en los centros de las ciudades. Los pasos subterr¨¢neos vehiculares originan a los peatones muchas molestias y dificultades por las barreras infranqueables que crean, adem¨¢s de otros males a?adidos. Deben evitarse cuando no est¨¢n suficientemente justificados, como sucede en este caso, al trasladar el problema a las proximidades, sin mejores contrapartidas, ni siquiera econ¨®micas. Absolutamente de acuerdo en cuanto a los colegiales se refiere y tambi¨¦n al arbolado-
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.