Gonz¨¢lez y Mitterrand advierten al Reino Unido y Dinamarca que seguir¨¢n adelante en la uni¨®n europea

El presidente del Gobierno, Felipe Gonz¨¢lez, advirti¨® ayer a Dinamarca y al Reino Unido que si siguen dando largas a la ratificaci¨®n del Tratado de Maastricht "habr¨¢ que hacer una reflexi¨®n sobre qu¨¦ pa¨ªses tienen la voluntad de seguir adelante" con la construcci¨®n europea. Gonz¨¢lez dio este aviso en la conferencia de prensa con la que concluy¨® ayer la sexta cumbre franco-espa?ola, la ¨²ltima con un Gobierno socialista franc¨¦s -siete ministros galos y seis espa?oles asistieron a la reuni¨®n- que, seg¨²n los sondeos, ser¨¢ derrotado por el centro-derecha en las urnas en marzo.

Gonz¨¢lez record¨® el compromiso adquirido por los Doce en su cumbre de Lisboa en junio de ratificar el tratado antes de fin de a?o, pero recalc¨® que en diciembre, en Edimburgo, s¨®lo 10 pa¨ªses "habr¨¢n hecho sus deberes". Insinu¨® despu¨¦s que aquellos que "no honren ese compromiso" ser¨¢n los responsables del aplazamiento de la negociaci¨®n de ampliaci¨®n de la CE con los pa¨ªses de la zona de libre cambio.El retraso adquirido por esos dos pa¨ªses en la ratificaci¨®n de Maastricht, lament¨® el jefe del Gobierno, "sigue generando incertidumbre pol¨ªtica que no beneficia a la situaci¨®n econ¨®mica y pol¨ªtica por la que atraviesa la Europa comunitaria y la no comunitaria".

"SI el retraso es de dos o tres meses, es menos preocupante". "Si fuera indefinido, habr¨¢ que hacer una reflexi¨®n sobre qu¨¦ pa¨ªses tienen voluntad de seguir adelante" en la integraci¨®n europea. En los pasillos, Gonz¨¢lez precis¨® que sus palabras "no son una amenaza, sino una mera reflexi¨®n necesaria".

El comentario del presidente espa?ol, que fue el primer jefe de Gobierno en considerar inaceptables las exigencias danesas para ratificar Maastricht, cobra importancia despu¨¦s de que en la ¨²ltima semana hayan pasado por Madrid el titular dan¨¦s de Exteriores, Uffe Ellemann Jensen, y el l¨ªder del principal partido de la oposici¨®n, el socialdem¨®crata Poul Rasmussen.

Gonz¨¢lez y su anfitri¨®n, el presidente Fran?ois Mitterrand, dedicaron el grueso de la cumbre, interrumpida por un paseo bajo la lluvia para visitar la catedral y el Museo Toulouse-Lautrec, a preparar el Consejo Europeo de Edimburgo de diciembre, en el que se deber¨ªa aprobar el aumento del presupuesto comunitario de aqu¨ª a 1997 que conlleva la creaci¨®n de un fondo de cohesi¨®n del que Espa?a ser¨ªa el principal beneficiario.

'Trancia adoptar¨¢ una posici¨®n favorable a la pol¨ªtica de cohesi¨®n", afirm¨® Mitterrand, pero a continuaci¨®n matiz¨® que ese incremento presupuestario deb¨ªa ser r¨¢pido, pero tambi¨¦n "conforme a nuestras posibilidades de financiaci¨®n". El jefe del Estado franc¨¦s se apunta a la sugerencia del presidente Delors de prolongar en dos a?os, hasta 1999, la subida prevista del presupuesto de la CE. Espa?a pretende que el 30% de aumento se alcance ya en 1997.

En el plano estrictamente bilateral, Mitterrand anunci¨® la creaci¨®n de una estructura de concertaci¨®n, que empezar¨¢ a funcionar a principios de 1993, para poner en marcha un tren de alta velocidad que enlace Barcelona con Perpi?¨¢n, y que har¨ªa el trayecto en 50 minutos en lugar de tres horas. Barcelona quedar¨ªa a cuatro horas y media de Par¨ªs. "El compromiso de Francia", record¨® Gonz¨¢lez, "es que el tren llegue a la frontera francesa [con Espa?a] en el 2002".

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