"Quiero acabar con la dictadura de Castro"
Hab¨ªa agitaci¨®n en los estudios Paramount. Esa misma ma?ana acababa de dimitir su director Brandon Tartikoff. C¨¢maras y periodistas apostados a la puerta. Sin embargo, Andy Garc¨ªa estaba muy tranquilo, trabajando en el montaje de un documental sobre el m¨²sico cubano Cachao. "Es un bajista genial, afincado en Miami, uno de los pioneros del mambo", dice. "Hace unos meses organizamos un concierto y decid¨ª rodarlo y completarlo con una entrevista con ¨¦l".En el documental se puede ver a Andy dando palmas, al escritor Guillermo Cabrera Infante observando con seriedad c¨®mo el actor Robert Duvall muestra sus habilidades de bailar¨ªn de mambo o al saxofonista Paquito d'Rivera. ?Qu¨¦ hace Robert Duvall ah¨ª?. "Est¨¢ interpretando un papel de cubano en su ¨²ltima pel¨ªcula y vino a verme para prepararse, as¨ª que me lo llev¨¦ al concierto, es un fan¨¢tico del mambo y bueno, ya t¨² sabes, los cubanos terminamos por convertir a todos nuestros amigos en cubanos".
Pregunta. ?Por qu¨¦ eligi¨® a Guillermo Cabrera Infante para el gui¨®n de Lost city?
Respuesta. Siempre he admirado las novelas de Guillermo [Cabrera Infante] y ten¨ªa la idea de hacer una pel¨ªcula sobre aquella ¨¦poca, los a?os de la Revoluci¨®n pero desde el punto de vista de la m¨²sica, del Tropicana Cuando tuve la oportunidad, habl¨¦ con el productor Gary Luchessi y decidimos propon¨¦rselo a Guillermo. Yo no le conoc¨ªa as¨ª que fui a Londres, llam¨¦ a su puerta y le dije: "Quiero hacer esta pel¨ªcula y si usted no la escribe yo no la hago, porque usted es el ¨²nico que puede escribirla". Debi¨® de ver algo en m¨ª de loco cubano por la m¨²sica, porque pese a sus anteriores malas experiencias como guionista de cine acept¨® hacerlo. Yo le habl¨¦ mucho de sus novelas, de los momentos que me gustar¨ªa reflejar en la pel¨ªcula, no s¨¦, supongo que le ca¨ª bien...
El primer gui¨®n ten¨ªa 340 p¨¢ginas y yo, ingenuamente, lo traje a Paramount y pusieron el grito en el cielo. No lo pod¨ªan ni leer, demasiado para ellos. Guillermo lo acort¨® y reestructur¨® pero sin perder nada del esp¨ªritu y del ambiente que narraba, ahora est¨¢ m¨¢s acoplado a lo que los estudios quieren, pero como Bailando con lobos o Platoon, este tipo de proyectos siempre son una batalla personal.
P. ?Cu¨¢ndo piensa rodarla?
R. Si fuera un poco m¨¢s barata ya. la habr¨ªa hecho hace tiempo. No va a ser un proyecto a lo Hollywood, pero quiero que todo est¨¦ muy cuidado. Quiero rodar con la luz del invierno en el Caribe. Aqu¨ª asusta todo lo que es original, pero en Hollywood se equivocan al creer que hay que repetir los ¨¦xitos, hay que ofrecer cosas ¨²nicas. Constantemente me preguntan %por qu¨¦ se interrumpe aqu¨ª la historia y hay este n¨²mero musical de un tal Benny Mor¨® o Bola de nieve?". Y yo les contesto: "Porque de eso trata, esas son las razones por las que quiero hacer esta pel¨ªcula". 0 llegan a proponerme guionistas para reescribir el gui¨®n. Y yo les digo: "?Se reescribe a Hemingway?". Esta es una pel¨ªcula de g¨¦nero y el g¨¦nero es Cabrera Infante, porque ¨¦l tiene su propio g¨¦nero.
P. El gui¨®n habla de amor y de m¨²sica, pero al mismo tiempo no elude la pol¨ªtica, es muy directo. Es algo as¨ª como Casablanca cruzada con Novecento.
R. Sinceramente es un ataque a la pol¨ªtica en general. La ciudad perdida es una pel¨ªcula anti Batista, anti castrista, pero pro Cuba. Todas las pel¨ªculas tienen un punto de vista. El nuestro es que el pol¨ªtico y la pol¨ªtica son los antagonistas, mientras que la m¨²sica, la literatura, la gente son los verdaderos protagonistas. Es m¨¢s Novecento que Casablanca, aqu¨ª el protagonista es alguien con ra¨ªces, enamorado de su tierra, de la m¨²sica de su club. El es cubano, pero no se afilia a ninguna de las dos facciones en lucha. Lo que ambos movimientos crearon fue la destrucci¨®n de la democracia, ninguno respet¨® la Constituci¨®n. El padre del personaje es un senador, alguien con respeto democr¨¢tico, defensor de los derechos humanos, ¨¦sa es la politica que defiende nuestro personaje.
P. The lost city es m¨¢s que un t¨ªtulo una declaraci¨®n sobre La Habana en particular y Cuba en general.
R. Yo estoy absolutamente comprometido con Cuba, quiero acabar con la dictadura de Castro. La ciudad est¨¢ perdida, aquella Habana nunca volver¨¢ a existir, pero hay que avanzar. Cuanto antes empiece el cambio, mejor. Yo quiero ir a Cuba y ayudar en lo que pueda. Lo que no voy a hacer es ayudar a Fidel Castro. Fidel tiene que mirar a su pa¨ªs en t¨¦rminos de miseria, de violaci¨®n de los derechos humanos, es un aut¨¦ntico desastre. Cuba es una pa¨ªs que, econ¨®micamente, siempre ha estado en mejor situaci¨®n que sus vecinos. Su econom¨ªa en los cincuenta era muy poderosa, hay que recuperar aquella posici¨®n, y por supuesto recuperar la democracia. En Cuba se ven mis pel¨ªculas y eso me emociona. S¨¦ que all¨ª me aprecian, que me sienten parte de su pueblo.
Y yo con ellos tengo la misma relaci¨®n, por encima de la pol¨ªtica. Hay un guaguac¨® muy lindo de los mu?equitos de Matanza (canta): "Yo soy cubano y no lo niego. Por mi Cuba yo me muero y no lo niego". Esa es la realidad. Soy cubano, pero no castrista.
P. ?Cree que los latinos de Estados Unidos ser¨¢n capaces de hacerse con poder en la industria de Hollywood? ?Aparecer¨¢ un Spike Lee latino que utilice la provocaci¨®n para hacerse o¨ªr?
R. Sinceramente, creo que depende del dise?o de provocaci¨®n. Si es inteligente y justa estoy de acuerdo, pero si la motivaci¨®n para provocar es comercial... Provocar siempre es bueno, pero me gustar¨ªa pensar que se hace con buena intenci¨®n. Ahora mismo hay muy pocos directores hispanos, pero vamos a cambiar eso. Le¨®n Ichazo, Orlando Jim¨¦nez Leal, lo est¨¢n intentando. Y actores como Ra¨²l Juli¨¢, H¨¦ctor El?zondo, Eddie Olmos, cada vez estamos en una mejor situaci¨®n, dirigimos nuestros propios proyectos. Cada vez m¨¢s, se van a rodar pel¨ªculas con tema hispano pero, eso s¨ª, habladas en ingl¨¦s.
P. Viviendo en Los ?ngeles, una ciudad donde el 46% de la poblaci¨®n es de origen latino, ?c¨®mo vio los disturbios de mayo y en general los problemas raciales y sociales de EE UU?
R. Aqu¨ª siempre ha habido problemas de este tipo en lo que se llama inner city (el interior de la ciudad). No es la primera vez que desembocan en violencia. Los disturbios fueron muy importantes, como llamada de atenci¨®n sobre los problemas de
ciertas ¨¢reas de poblaci¨®n, pero yo no creo sea un problema americano, creo que es un problema mundial, es un problema social. Yo asumo mi responsabilidad a nivel personal, trato de ser un ejemplo para la juventud. Muchos de los problemas vienen por familias destruidas, ni?os que en su casa carecen de ejemplos positivos. Salen a la calle buscando esos modelos en los amigos, en las bandas... hay que tratar de acabar con eso.P. Hero, dirigida por Stephen Frears, es su primera comedia y usted trabaja en ella junto a dos nombres importantes como Dustin Hoffman y Geena Davis.
R. Hero es una comedia muy sat¨ªrica, bastante negra y sofisticada. Muy en el estilo de Preston Sturges o Frank Capra. Aparte del gui¨®n, me atrajo much¨ªsimo trabajar con Stephen Frears, yo admiraba mucho sus pel¨ªculas anteriores. A la vez tambi¨¦n era su primera comedia y su primer proyecto en Hollywood con un pel¨ªcula de estudio y de gran presupuesto. Esto tambi¨¦n implica una fuerte presi¨®n y uno debe ser inteligente y no terminar por hacer una pel¨ªcula diferente a su idea original. Con experiencia y poder, puedes mantener una relaci¨®n m¨¢s privada, donde te dejen trabajar. Para otros, por falta de costumbre, puede ser una lucha agotadora. Yo creo que Frears prefiere el mercado independiente, aunque se manej¨® muy bien con ellos.
Mi personaje era complicado, yo intent¨¦ que tuviera un aspecto real, que la comedia viniera de la situaci¨®n, no del actor, que las cosas que le pasan y lo que siente fuera real. Un d¨ªa durante el rodaje, el guionista David Peoples me dijo: "?A ti te gusta Buster Keaton? Porque me recuerdas a ¨¦l". Bueno, Keaton es mi actor de comedia favorito junto a Jacques Tati. Los dos son muy reales, muy econ¨®micos, dejan que la comedia venga de la situaci¨®n y no de una gracia de ellos.
P. En Jennifer 8, interpreta a un polic¨ªa que trata de proteger a la pr¨®xima v¨ªctima ciega (Urna Thurman) de un implacable serial killer. Es curioso que despu¨¦s de Frears, Kenneth Branangh, Mike Figgis, Ridley Scott, vuelva, en este caso con Bruce Robinson, a trabajar con un director ingl¨¦s. ?Prefiere directores europeos o han sido s¨®lo coincidencias de su carrera?
R. Bueno, es algo de lo que no soy consciente, pero reconozco que me gusta la sensibilidad europea, me atrae ese diferente punto de vista. Jennifer 8, por ejemplo, destaca por su ambiente, su cuidada fotograf¨ªa, es un tipo de pel¨ªcula inusual. La rod¨¦ varios meses despu¨¦s de Hero; es pura coincidencia que se estrenen juntas. Elijo cuidadosamente y no hago muchas pel¨ªculas. No me importar¨ªa hacer muchas m¨¢s, pero no abundan los buenos guiones. Hay mucha gente con la que me gustar¨ªa trabajar y estoy a la espera de encontrar el proyecto adecuado que nos guste a ambos.
P. ?C¨®mo consigui¨® abrirse camino en Hollywood?
R. Llegu¨¦ a Miami a los cinco a?os, con mis padres y, all¨ª mismo, en Florida estudi¨¦ interpretaci¨®n. En 1978 decid¨ª mudarme a Los Angeles para buscar trabajo y piense que hasta 1985 no interpret¨¦ un papel en cine que se pudiera considerar importante, en The main season. Fueron siete duros a?os, especialmente dif¨ªciles para cualquier actor latino o negro; es muy dif¨ªcil abandonar el estereotipo, que no te miren como "actor latino", sino sencillamente como actor. Luego, una vez que empiezan a conocerte tienes que luchar porque no te encasillen en el mismo papel. La batalla es constante.
P. Ha hablado de Jacques Tati y de Buster Keaton, pero es de suponer que cuando comenz¨® su carrera admiraba a actores contempor¨¢neos.
R. Bueno, me estusiasmaban el James Bond de Sean Connery las comedias con Peter Sellers. En los setenta se produjo la gran eclosi¨®n del cine americano. Fueron los a?os de El padrino, El ¨²ltimo deber, Shampoo, Midnight cowboy, Taxi driver, pel¨ªculas que en s¨ª mismas son maravillosas, pero que al mismo tiempo revolucionaron la actuaci¨®n cinematogr¨¢fica. Eran interpretaciones muy reales y a la vez con mucha profundidad y me marcaron mucho a la hora de decidir ser actor. A?os despu¨¦s he llegado a actuar con muchos de ellos. Con Dustin Hoffman, Al Pacino, Robert de Niro, Robert Duvall... es un sue?o lograr trabajar con aquellos actores que tanto admiraba. Son oportunidades no s¨®lo para aprender, tambi¨¦n quieres mostrarles tu trabajo, que tienes talento.
P. ?Y Sean Connery? Con ¨¦l trabaj¨® usted en Los intocables, la pel¨ªcula que le situ¨® definitivamente como un actor a tener en cuenta.
R. Sean Connery es larger than life (m¨¢s grande que la vida), fue un aut¨¦ntico placer trabajar con ¨¦l. Es una grand¨ªsima persona. En Los intocables acert¨¦ al sospechar que pod¨ªa ser una pel¨ªcula que despertara mucha expectaci¨®n. Era un gui¨®n sencillo pero con mucho potencial visual. Dio la casualidad que fue una pel¨ªcula muy taquillera y me benefici¨® mucho.
P. Pero fue El padrino III la pel¨ªcula que le situ¨® como una estrella en Hollywood. Es de imaginar que tras Marlon Brando y Al Pacino, usted es el "padrino" en reserva.
R. S¨ª, soy el "padrino" en reserva... y yo encantado har¨ªa la cuarta parte, pero siempre que fuera Coppola quien dirigiera y, escribiera la pel¨ªcula. Es un director fant¨¢stico improvisa mucho, te da mucha libertad. Le gusta mucho hablar, describirte el ambiente, lo que est¨¢ pasando en la familia, te da toda la informacion posible, las motivaciones, las ansiedades, los puntos; fuertes y d¨¦biles de los personajes, para que cuando empieces la. pel¨ªcula no seas t¨² como actor quien interpreta las cosas, sino el personaje. Y esos son papeles muy dif¨ªciles de conseguir, mucha gente pelea por ellos.
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