El laborismo consigue un avance hist¨®rico en las elecciones irlandesas
Dick Spring, un ex jugador de rugby de 36 a?os, se convirti¨® ayer en la figura central de la pol¨ªtica irlandesa. El l¨ªder laborista y su partido obtuvieron un avance hist¨®rico en las elecciones generales del mi¨¦rcoles, de acuerdo con los primeros recuentos de votos. El Partido Laborista salt¨® desde los 16 diputados a unos 30 y, tal como preve¨ªan las encuestas, no podr¨¢ formarse Gobierno sin su participaci¨®n. El conservador Fianna F¨¢il, que esperaba obtener la mayor¨ªa absoluta, perdi¨® miles de votos y cinco o seis de los 77 esca?os que ten¨ªa en el anterior Parlamento.
El Fianna F¨¢il del primer ministro Albert Reynolds encaj¨® los primeros resultados casi como una derrota, aunque anunci¨® que no dimitir¨¢. Se manten¨ªa en su papel hist¨®rico de partido m¨¢s votado, pero sus 71-74 esca?os (siempre seg¨²n proyecciones a partir de las primeras urnas) sab¨ªan a fracaso. Reynolds convoc¨® unas elecciones anticipadas con el objetivo de obtener una mayor¨ªa absoluta, situaci¨®n de la que no ha disfrutado ning¨²n partido irland¨¦s en el ¨²ltimo medio siglo, pero ayer se encontraba, en cambio, en una situaci¨®n de completa dependencia frente a los laboristas.El nuevo papel de Dick Spring como ¨¢rbitro del D¨¢il (Parlamento) se hizo evidente conforme dirigentes de los dem¨¢s partidos se apresuraban a felicitarle y a ensalzar su moderaci¨®n, su talla de estadista y su habilidad electoral. S¨®lo dos d¨ªas antes, los mismos que ayer le felicitaban se desga?itaban acus¨¢ndole de tramar una brutal subida de los impuestos. El enemigo en la campa?a se hab¨ªa convertido en un deseado socio de coalici¨®n.
El crecimiento laborista fue espectacular en Dubl¨ªn y su entorno urbano, pero fue notable tambi¨¦n en las zonas rurales del oeste de la isla, feudo hist¨®rico del Fianna F¨¢il y del correspondiente p¨¢rroco cat¨®lico. Con un sistema electoral como el espa?ol, proporcional casi puro, el Partido Laborista podr¨ªa haber aspirado a dar un vuelco completo a la pol¨ªtica irlandesa. Pero el sistema irland¨¦s, a medio camino entre el modelo mayoritario (brit¨¢nico) y el proporcional (italiano), hace casi imposibles los grandes cambios.
Si el ambiente en Mount Smith, sede del Fianna F¨¢il, era triste, la sede del Fine G¨¢el supuraba amargura. El Fine G¨¢el, gemelo y gran rival del Fianna F¨¢il, hab¨ªa comparecido ante las urnas seguro de ganar posiciones. Pero los primeros recuentos se?alaban lo contrario. Se manten¨ªa como segundo partido, con unos 50 esca?os, pero perd¨ªa cinco o seis diputados y ve¨ªa alejarse su objetivo de formar coalici¨®n de gobierno con los laboristas.
Corrupci¨®n gubernamental
El peque?o partido Dem¨®cratas Progresistas (DP), una escisi¨®n del Fianna F¨¢il de la que no se esperaba gran cosa, mantuvo sus seis esca?os. El DP era hasta hace un mes socio del Fianna F¨¢il en el Gobierno, pero, sorprendentemente, no se vio afectado por el rechazo de los ciudadanos a la corrupci¨®n gubernamental de los ¨²ltimos a?os. Su virulenta ruptura con el partido de Reyndolds fue, sin duda, la mejor propaganda electoral. Su l¨ªder, Des O'Malley, pregonaba ayer a los cuatro vientos su disposici¨®n a coligarse con cualquiera que hiciera ofertas.De confirmarse los resultados al final del recuento, esperado para esta tarde, la coalici¨®n de gobierno m¨¢s razonable ser¨ªa la de Fianna F¨¢il con laboristas. La suma de ambos partidos dispondr¨ªa de una amplia mayor¨ªa en el D¨¢il. Otra opci¨®n ser¨ªa el tr¨ªo Fine G¨¢el m¨¢s laboristas m¨¢s Dem¨®cratas Progresistas (la llamada "coalici¨®n arco-iris"). Y ser¨ªa tambi¨¦n posible, te¨®ricamente, recomponer la alianza Fianna F¨¢il-Dem¨®cratas Progresistas, la misma que se tir¨® los trastos a la cabeza y provoc¨® las elecciones anticipadas. Esa soluci¨®n, visto el profundo deseo de cambio expresado por el electorado, ser¨ªa demasiado irlandesa incluso para Irlanda.
Dick Spring afirm¨® que la formaci¨®n de Gobierno llevar¨ªa tiempo y que los laboristas s¨®lo pactar¨ªan a partir de una base program¨¢tica de centro-izquierda, reservando para su partido las carteras socioecon¨®mical y para s¨ª mismo el cargo de viceprimer ministro. De acercarse al Fianna F¨¢il, Spring sugerir¨ªa tambi¨¦n, probablemente, la conveniencia de sustituir al impopular Albert Reynolds por otro l¨ªder (tal vezel actual ministro de Finanzas, Bertie Ahem).
La formaci¨®n del nuevo Gobiemo debe producirse el pr¨®ximo 14 de diciembre. En las pr¨®ximas semanas, los partidos se lanzar¨¢n a un frenes¨ª de negociaciones "en salas cerradas y llenas de humo", como dice la vieja frase sobre la opacidad de la pol¨ªtica irlandesa. El Fianna F¨¢il ser¨¢ un hervidero de conspiraciones. El primer ministro en funciones, Albert Reynolds, deber¨¢ lidiar mientras tanto con la crisis monetaria y con la crucial cumbre comunitaria de Edimburgo. A su vuelta podr¨ªa encontrarse con la carta de despido. Reynolds sucedi¨® al anterior l¨ªder del partido y del Gobierno, Charles Haughey, hace menos de un a?o. Si cayera, se convertir¨ªa en el taoiseah (pr¨ªmer ministro) m¨¢s ef¨ªmero de la historia de Irlanda.
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