B¨²rbulis, el cord¨®n umbilical de la reforma
Arkadi Volski, el l¨ªder de Uni¨®n C¨ªvica, dijo ayer que no piensa "llorar" si el presidente de Rusia, Bor¨ªs Yeltsin, sacrifica a Guennadi B¨²rbulis, el cerebro en la sombra del curso reformista del Gobierno. Pero, por el momento, Yeltsin no quiere sacrificar a B¨²rbulis en aras de un pacto con la gran industria del pa¨ªs.De todas las cabezas pol¨ªticas que Volski ha pedido para respaldar a Yeltsin en la dif¨ªcil sesi¨®n del Congreso de los Diputados del pr¨®ximo d¨ªa 1 de diciembre, la de B¨²rbulis, de 47 a?os, es la m¨¢s importante. Su importancia no reside en el puesto que ocupa, sino en la influencia personal que este ex profesor de filosofia marxista ejerce sobre Yeltsin. B¨²rbulis ha sido -y sigue siendo- el cord¨®n umbilical que vincula a Yeltsin con la reforma. Y por eso, si se mantiene la relaci¨®n ¨²nica que existe entre ambos, es irrelevante que B¨²rbulis sea secretario de Estado, o, desde ayer, jefe de su equipo de consejeros.
B¨²rbulis conoci¨® a Bor¨ªs Yeltsin en 1989 cuando ambos eran diputados sovi¨¦ticos, y dirigi¨® la campa?a electoral que llev¨® a ¨¦ste a la presidencia de Rusia. M¨¢s tarde, aplic¨® su talento a hacer que Yeltsin diera vida a las decisiones conceptuales que ¨¦l tomaba entre bastidores, ayudado por expertos que hoy, en parte, est¨¢n en el Gobierno.
Yegor Gaidar y su equipo monetarista deben sus cargos a B¨²rbulis, pues ¨¦l fue quien los present¨® a Yeltsin. Muchos analistas, incluido el mismo Mija¨ªl Gorbachov, ven en B¨²rbulis al principal agente de la desaparici¨®n de la URSS en diciembre de 1991. Esta interpretaci¨®n simplista no refleja lo que es la clave del comportamiento de B¨²rbulis: sacar conclusiones sobre la realidad y actuar en consecuencia de forma implacable.
Carente de una imagen atractiva que le permita granjearse la simpat¨ªa del electorado, B¨²rbulis, que concibe la pol¨ªtica como un arte y se ve a s¨ª mismo como un artista, ha convertido a Yeltsin en un "cohete portador" de sus ideas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.