La olvidada carpa del V Centenario acaba como tienda de saldos de los fastos del 92
La carpa del V Centenario ha abierto de nuevo despu¨¦s de cinco meses sin acoger una exposici¨®n. Pero el traj¨ªn de familias que salen cargadas de bolsas con camisetas y gorras no se corresponde con lo que el V Centenario dec¨ªa hace un mes que estaba programado: una exposici¨®n de filatefia y otra sobre la flota de las Indias. Bajo la lona s¨®lo hay, a precio de saldo, 100 millones en Curros, Cobis y objetos de recuerdo de los fastos del 92.
Lo que se oye bajo la carpa -que ahora se llama Ocasi¨®n 92 y estar¨¢ abierta hasta fin de a?o- son frases como ¨¦stas: "Mira, esto para mi sobrina" o "?le gustar¨¢ el mu?eco a Pep¨ªn?". Un hormiguero humano rodeaba el d¨ªa de la inauguraci¨®n, el s¨¢bado, las pir¨¢mides de cajas -agrupadas por precios o tallas. La gente alargaba la mano, tocaba un poco el algod¨®n de la camiseta o el nailon de la mochila, se cercioraba del chollo anunciado -por ejemplo, 495 pesetas unas camisetas con Cobi haciendo posturitas, que antes costaban el triple- y echaba el bot¨ªn al cestillo.Los cr¨ªos estaban encandilados con Curro, la mascota de la Expo, y los mayores corr¨ªan al rinc¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos -cada vez m¨¢s desabastecido- para lanzarse sobre las dos modalidades de su mascota: Cobi osito o Cobi trajeado, por el m¨®dico precio de 495 pesetas cada uno -tres, 1.295-. En El Corte Ingl¨¦s val¨ªan m¨¢s de 3.000 pesetas.
Juli¨¢n D¨ªaz, director de TNT Leasing Espa?a, la empresa que comercializa los recuerdos, dice que este zoco responde a buenas y altruistas razones: que todos los madrile?os disfruten de la Expo y los Juegos sin haber estado all¨ª. Lo mismo explican en el V Centenario, que ha ofrecido ahora esta instalaci¨®n, cuyo terreno -en la zona de Cuatro Caminos- le fue cedido hace tres a?os por el Canal de Isabel[ II, de la Comunidad de Madrid, "porque no hab¨ªa salas de exposiciones adecuadas".
Un directivo del organismo estatal no facilit¨® -como, ya ocurri¨® en otras ocasiones- cu¨¢nto cost¨® instalar esta carpa que ha estado inutilizada medio a?o. Fuentes pr¨®ximas a los organizadores calculan que montarla y acondicionar la zona -asfaltar el suelo, los jardines, servicios, oficinas...- cost¨® al menos 100 millones.
Tantas cajas marrones, repletas de ceniceros con Curro, mochilas rojas con sellos de la Expo o viseras ol¨ªmpicas son demasiado dinero -2.000 objetos diferentes por valor de 100 millones- para que se queden en cualquier almac¨¦n. "?Calcularon mal al fabricar tantos recuerdos?". "Nooo", responde D¨ªaz, el directivo de TNT, quien asegura que se acabar¨¢n vendiendo. Las torres de cajas bajo la carpa parecen decir lo contrario. Las sobras del pastel de la Expo se venden tambi¨¦n en Sevilla.
700 insignias
El primer d¨ªa ya ofreci¨® en Madrid una an¨¦cdota, en el "rinc¨®n del coleccionista", una carpa m¨¢s peque?a, donde se venden insignias y los libros: dicen que lleg¨® un se?or y se llev¨® 700 pins, 57.000 pesetas por lo menos. Por la tarde, una se?ora del barrio de Salamanca compraba, m¨¢s modestamente, 5.000 pesetas en camisetas y recuerdos. "Como ahora nos vamos a Am¨¦rica a pasar la Navidad, nos viene muy bien", comentaba la mujer.
La Expo de Sevilla, los Juegos, Colombo 92 -la exposici¨®n de G¨¦nova-, el V Centenario y, c¨®mo no, Madrid Capital Europea de la Cultura est¨¢n presentes, seg¨²n la propaganda. Pero lo que m¨¢s se ve¨ªa eran ch¨¢ndales y otras cosas con la efigie de un le¨®n: Crist¨®foro, la mascota de la Expo genovesa.
Ana, una peruana, acarreaba un alijo de gorras amarillas de Barcelona 92 para llevarse a su pa¨ªs por navidades. Jugueteaba con un Cobi prisionero en una pelota. En su cesta no hab¨ªa nada del V Centenario. "Por supuesto", dijo.
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