Siete estudiantes de Getafe 'condenan' a un hombre de 22 a?os acusado de vender hachis

Veredicto: "Culpable". A esta conclusi¨®n llegaron los siete alumnos de formaci¨®n profesional de Getafe, de entre 16 y 20 a?os, que intervinieron ayer como jurado en un juicio real que sent¨® en el banquillo a un muchacho de 22 a?os acusado de vender 1.000 pesetas de hach¨ªs en las inmediaciones de la plaza de Chueca. Nunca antes se hab¨ªa celebrado en Espa?a un juicio con un jurado integrado exclusivamente por estudiantes. Los miembros del jurado se sentaron en el estrado de la sala, a la misma altura que el juez, el fiscal y el abogado. Tras varias horas de deliberaci¨®n, emitieron un fallo condenatorio, que no tendr¨¢ car¨¢cter vinculante para el promotor de esta iniciativa, el juez Jos¨¦ Antonio Alonso Su¨¢rez.

"Es la juventud la esfera social m¨¢s castigada por la droga; por eso la idea de subir a un grupo al estrado para que opine y se pronuncie sobre un hecho real", vino a decir, al t¨¦rmino del juicio, Fernando Oliete, abogado del encausado y tambi¨¦n part¨ªcipe en la iniciativa.Durante los 60 minutos que dur¨® la vista, los miembros el jurado -cinco chicos y dos chicas- anotaron cuidadosamente las respuestas del procesado, Javier Terrazas Frutos de 22 a?os. La vista se celebr¨® en el Juzgado de lo Penal n¨²mero 14.Con esta iniciativa, la intenci¨®n del juez, Jos¨¦ Antonio Alonso, era pulsar el ambiente que se respira en el seno de un grupo de estudiantes (adscritos a distintos estratos sociales de Getafe, municipio muy castiga do por la droga) sobre un presunto traficante.

Intercambio de droga

El c¨®digo penaliza el tr¨¢fico de droga, no el consumo, de ah¨ª que todo el esfuerzo del fiscal, al contrario que la defensa, se centrara en demostrar que el acusado vendi¨® -no intercambi¨®- 1.000 pesetas de hach¨ªs, el 19 de marzo de 1991, a un joven cuyas iniciales son J. C. V. Este actu¨® como testigo.El fiscal pidi¨® un a?o de c¨¢rcel para el procesado y ampar¨® su acutuaci¨®n en que existi¨® tr¨¢fico de droga. Sin embargo, la defensa sostuvo que Terrazas y V¨¢zquez " eran amigos", y estaban "intercambiando hach¨ªs, que cada uno compr¨® por su lado", el d¨ªa que les sorprendi¨® la polic¨ªa en la calle de Augusto Figueroa.

Los estudiantes, tras deliberar durante varias horas, dijeron s¨ª a las cuatro preguntas que le formul¨® el juez. ?Es cierto que el acusado y el presunto comprador estuvieron el d¨ªa y hora indicados por el fiscal en la calle de Augusto Figueroa? ?Es cierto que el acusado vendi¨® 0,9 gramos de hach¨ªs al supuesto comprador? ?Es cierto que a cambio de esta entrega el comprador le dio 1.000 pesetas? ?Se conoc¨ªan ambos?

"Han sido los que mejor han desempe?ado su papel de todos los que est¨¢bamos en la sala", d¨²o ayer el juez Alonso: "Han hecho un veredicto con una gran madurez y un elevado grado de razonamiento".

La sentencia real ser¨¢ dada a conocer probablemente, despu¨¦s de las navidades. No obstante, el juez Alonso tiene previsto visitar dentro de unas semanas el instituto donde estudian los chavales y redactar con ellos "una hip¨®tesis de sentencia basada en el veredicto".