Israel ordena la deportaci¨®n de 418 palestinos acusados de pertenecer a los integristas de Hamas

El Gobierno israel¨ª orden¨® ayer la deportaci¨®n hacia L¨ªbano de 418 palestinos acusados de pertenecer a la organizaci¨®n integrista Hamas, despu¨¦s de que el Tribunal Supremo confirmar¨¢ la orden decretada la v¨ªspera por el Gobierno laborista de Jerusal¨¦n. Se trata de la expulsi¨®n masiva m¨¢s importante desde el principio de la ocupaci¨®n israel¨ª, hace 25 a?os. Los palestinos v¨ªctimas de esta medida esperaron 24 horas el veredicto de la m¨¢s alta juridicci¨®n israel¨ª, con las manos atadas y los ojos vendados, repartidos en 22 autobuses cerca de la frontera libanesa.

La medida decretada por Israel, que fue criticada ayer por el presidente de Estados Unidos, George Bush, y por el secretario de la ONU, Butros Gali, supone una respuesta al secuestro y muerte del sargento de la guardia fronteriza israel¨ª Nisim Toledano. Los 22 autobuses que transportaban a los deportados palestinos comenzaron a cruzar la frontera internacional entre Israel y la "zona de seguridad" ocupada por el Estado hebreo en el sur de L¨ªbano a las 19.00 hora espa?ola. Un Portavoz de las Fuerzas Armadas de L¨ªbano se?al¨® ayer que su pa¨ªs rechazara categ¨®ricamente a los palestinos enviados por Israel a la frontera.Todos los miembros del Gobierno, incluyendo los tres ministros del partido de izquierda Meretz, votaron a favor de la decisi¨®n, con la excepci¨®n del ministro laborista de Justicia, David Libayi, quien se abstuvo.

Los representantes del Gobierno adujeron ante el tribunal que se trataba de una medida "indispensable para salvar vidas humanas", y que el encarcelamiento constitu¨ªa un castigo insuficiente, "ya que esta gente se organiza y aprende nuevos m¨¦todos de lucha contra Israel en la prisi¨®n". A?adieron que no se trataba de una expulsi¨®n sino de un "alejamiento transitorio, ya que los palestinos podr¨¢n volver a casa al cabo de dos a?os".

En un discurso ante el comit¨¦ central del partido laborista, el primer ministro, Issac Rabin, defendi¨® la medida decretada por el Gobierno al asegurar que los expulsados tendr¨¢n el derecho de recurrir tras un plazo de 60 d¨ªas.

La controvertida decisi¨®n del Gobierno laborista refleja su desconcierto ante la situaci¨®n. Despu¨¦s de la muerte de varios soldados israel¨ªes a manos de Hamas, y del secuestro, seguido del asesinato, de un sargento de polic¨ªa en Tel Aviv, es decir en el coraz¨®n mismo del Estado israel¨ª, el Gobierno deb¨ªa tomar alg¨²n medida susceptible de tranquilizar a la opini¨®n p¨²blica y demostrar la firmeza de las autoridades frente a los integristas, opuestos a cualquier tipo de negociaci¨®n con Israel.

Sin embargo, en la izquierda del espectro pol¨ªtico, los pol¨ªticos recalcan que no sirve para nada reprimir a Hamas si no se formula al mismo tiempo "propuestas serias" a los palestinos en Washington. "S¨®lo una hu¨ªda hacia adelante, hacia la paz, puede permitir al Gobierno laborista recobrar la popularidad que ha ido perdiendo", afirmaba un ministro laborista.

Los representantes de las naciones arabes que participan en Washington en las negociaciones de paz para Oriente Pr¨®ximo anunciaron ayer un boicoteo en protesta por el intento de Israel de expulsar de su territorio a 418 musulmanes fundamentalistas. La crisis en la s¨¦ptima ronda de las negociaciones de paz amenaza con empeorar si finalmente la expulsi¨®n que ha sido temporalmente detenida por los tribunales israel¨ªes, se lleva a cabo. Los problemas han estallado cuando ¨¢rabes e israel¨ªes estaban a punto de concluir las sesiones del ¨²ltimo de su ronda, en la que no se han alcanzado progresos.