Ricardo Bofill inaugura su primer rascacielos en el centro de Chicago

El edificio de oficinas Donnaly, construido por el Taller de Arquitectura Ricardo Bofill, se inaugur¨® ayer en el n¨²mero 77 de la West Wacker Drive de Chicago (Illinois, EE UU). Se trata del primer rascacielos construido por el arquitecto catal¨¢n. Es una edificaci¨®n en la que, seg¨²n Ricardo Bofill, "la tecnolog¨ªa se reconcilia con la memoria" mediante la combinaci¨®n de recursos t¨¦cnicos con elementos de formas cl¨¢sicas y que ocupa un lugar de privilegio en la ciudad donde se levantaron los primeros rascacielos.

El edificio Donnaly se eleva a una altura de 200 metros sobre el r¨ªo Chicago y tiene 50 pisos, destinados ¨ªntegramente a oficinas. La superficie total construida es de 315.000 metros cuadrados. La edificaci¨®n del proyecto ha durado dos a?os y su coste roza los 100 millones de d¨®lares (m¨¢s de 10.000 millones de pesetas).

C¨²spide

La concepci¨®n del Donnaly por parte del Taller de Arquitectura parti¨® de un estudio de varias ciudades norteamericanas y de un an¨¢lisis de los rascacielos m¨¢s destacados de Chicago. Dada su situaci¨®n, el proyecto ha favorecido el empleo del cristal, pero uni¨¦ndolo al granito blanco, de una manera que evita que el edificio ofrezca la apariencia de un bloque de vidrio.Las dos caracter¨ªsticas m¨¢s relevantes del rascacielos creado por Bofill en Chicago son su, planta baja y su c¨²spide. La sala de entrada del edificio tiene 18 metros de altura y en su construcci¨®n se han empleado m¨¢rmoles grises (de la variedad Silver Grey) y blancos (del tipo llamado Royal Portuguese). La decoraci¨®n de este gran espacio de acceso al edificio la integran cuatro esculturas de Xavier Corber¨® y un mural de Antoni T¨¤pies. La c¨²spide del edificio, que en este tipo de construcciones se considera la firma del arquitecto, es una cu¨¢druple estructura triangular de m¨¢rmol blanco, cristal y granito que asemeja los frontones de un templo griego.

Las proporciones del edificio, seg¨²n explic¨® un portavoz del Taller de Arquitectura, "recuerdan a las del campanario de Giotto en la catedral de Florencia" y, para evitar la monoton¨ªa de una fachada lisa, el rascacielos tiene divisiones en varios niveles, unidos entre s¨ª por columnas de granito.

El edificio Donnaly se complementa con un aparcamiento subterr¨¢neo y un centro comercial adyacente. La construcci¨®n cuenta con las medidas de seguridad y control ambiental m¨¢s avanzadas y la movilidad interior la garantizan 21 ascensores -uno ultrarr¨¢pido hasta el piso 50-, 19 parciales para pasajeros, un elevador de carga y un elevador de autom¨®viles.