Los espa?oles gastaran este a?o en torno a 100.000 millones de pesetas en juguetes

Las modelos indolentes, pistas de coches y guerrilleros gal¨¢cticos siguen siendo el men¨² favorito de los ni?os unas navidades m¨¢s. El a?o pasado el sector juguetero vendi¨® en Espa?a por valor de 101.045 millones de pesetas, lo que supone un gasto anual por ni?o superior a las 13.000 pesetas a precios de f¨¢brica. La previsi¨®n de ventas para 1992 baja un 10%, teniendo en cuenta el descenso de la natalidad, la incorporaci¨®n de los menores a patrones de consumo adultos y la fiebre del videojuego, que ella sola puede suponer a final de a?o un negocio cercano a los 45.000 millones de pesetas.

?Qu¨¦ prefieres: un libro o esos guerreros que tienes en la mano? David, de 10 a?os, circunspecto y con cara de consumidor exigente tard¨® medio segundo en contestar: "Los guerreros ?hombre!". Sus dudas estaban en otro terreno. Llevaba casi media hora, sofocado por la bufanda y el calor del centro comercial, vacilando entre dos colecciones de guerrilleros con distintos equipos de camuflaje y armamento. "Es que tengo que pensar qu¨¦ armas me vienen mejor", se justificaba. "?stos parecen m¨¢s reales", se?alaba los de su mano derecha. "Pero, no s¨¦...", miraba a su t¨ªa en busca de opini¨®n. "Claro es que tienen tantas cosas que ya no saben lo que quieren", sonre¨ªa ella algo inc¨®moda.Desde 1988, la empresa MB, l¨ªder mundial en figuras de acci¨®n, ha vendido en Espa?a seis millones de unidades de Gijoe, hombrecillos del futuro que nacieron en 1965 y ahora andan repartidos por el mundo con m¨¢s de 200 millones de ejemplares vendidos. Los datos recabados en algunos grandes almacenes confirman que este tipo de juguete ha cedido el liderazgo a versiones modernas del tradicional Scalectrix y motocicletas para aspirantes a yuppies.

Actrices y ecologistas

Las mu?ecas barbie y sindy siguen siendo indicutibles entre las ni?as. La primera con glamour de estrella esperando a Richard Gere y la segunda, ecologista, m¨¢s al gusto europeo. A estas se?oritas no les van mucho los rulos, afici¨®n para la que surgi¨® hace algunos a?os un peque?o pony sufridor de larga cabellera.Seg¨²n la Asociaci¨®n Nacional de Fabricantes de Juguetes, el pasado a?o el 75% de las ni?as espa?olas pose¨ªa al menos una unidad. Una peque?a lleg¨® a coleccionar hasta 73 ponys diferentes. Al ¨²ltimo modelo se le llenaba el trasero de corazones rojos cuando hac¨ªa pis.

La venta de juguetes se concentra fundamentalmente entre los primeros d¨ªas de diciembre y el 6 de enero. En Espa?a se vende el 77,08% de la producci¨®n nacional mientras el 22,92% se exporta, fundamentalmente a pa¨ªses de la CE. El gasto medio anual en Espa?a por cada ni?o ronda las 13.000 pesetas, cifra similar a la de Canad¨¢, ligeramente inferior a Francia, con un gasto de 18.148 pesetas, y muy por debajo de las 24.000 de Alemania.

Durante 1991 se registr¨® por primera vez un importante d¨¦ficit comercial ya que el valor de las importaciones de juguetes realizadas por Espa?a fue de 30.446 millones de pesetas, lo que supone un incremento del 60% respecto a 1990.

Esta circunstancia lleva al sector juguetero a hablar de "competencia desleal", al considerar que el mercado espa?ol se ve "inundado" por juguetes procedentes del Extremo Oriente.

Los fabricantes aseguran que en 1991 se importaron de China juguetes por valor de 10.699 millones de pesetas, lo que representa el 42% de toda la importaci¨®n espa?ola. Los jugueteros se enfrentan igualmente a la fuerte irrupci¨®n del videojuego, que empieza a sustituir a juguetes tradicionales a partir de los seis a?os, sin que todav¨ªa exista un consenso sobre sus efectos psicol¨®gicos.

La coordinadora Aprende a jugar, aprende a vivir, un programa especial de la Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos de Espa?a- ha criticado esta a?o el mensaje publicitario de los juguetes, campa?a que ronda los 19.000 millones de pesetas. Su opini¨®n es que "algunas televisiones y fabricantes de juguetes est¨¢n convirtiendo el juego en un instrumento para el aprendizaje de los valores m¨¢s cuestionados por la sociedad (sexismo, violencia, xenofobia, insolidaridad y competici¨®n extrema)".

Esto les ha movido a escribir una tarjeta de protesta al ministro de Transportes y Comunicaciones, Jos¨¦ Borrell, y a solicitar la retirada de hasta 15 anuncios de otros tantos juguetes de la programaci¨®n televisiva, por considerar que infringen la normativa comunitaria.