Un inmigrante dominicano brutalmente agredido en Madrid por un grupo de cabezas rapadas'

El dominicano Jos¨¦ Antonio Tav¨¢rez Pichardo, cocinero, de 41 a?os, fue agredido el lunes por la noche por un grupo de cabezas rapadas que le atacaron en la plaza de los Sagrados Corazones de Madrid al grito de "es del mismo lugar que Lucrecia P¨¦rez". La intervenci¨®n de varios transe¨²ntes no impidi¨® que este inmigrante, vecino de M¨®stoles, recibiera el golpe brutal de un pu?o de hierro en la cara, as¨ª como varias patadas. Tres de los 12 agresores -de 14, 15 y 16 a?os- fueron detenidos a los pocos minutos. Varios vigilantes jurados evitaron que los agresores fueran linchados.

"Si no me ayudan esas tres personas, seguro que me habr¨ªan matado", repet¨ªa ayer Tav¨¢rez, casado con una espa?ola -y con empleo fijo, que en sus tres a?os de residencia en Espa?a s¨®lo conoc¨ªa la xenofobia por la prensa y la televisi¨®n.

La agresi¨®n ocurri¨® hacia las siete de la tarde del pasado lunes, al dirigirse Tav¨¢rez al restaurante donde trabaja, cargado con dos bolsas de pollos que acababa de comprar. Iba por la calle con su uniforme blanco de cocina. En el pecho llevaba un anagrama en el que luc¨ªa su nombre y su pa¨ªs de origen. Cuando caminaba hacia la plaza de Lima, varios j¨®venes, la mayor parte cabezas rapadas, le salieron al paso. Uno de ellos grit¨®: "Mira, es del mismo lugar que esa Lucrecia a la que mataron" (en Aravaca, Madrid).

Tav¨¢rez recibi¨® en la cara un golpe con un pu?o de hierro que le propin¨® un joven de unos 25 a?os. Otro le dio una patada en la espalda. "Me qued¨¦ semi inconsciente", relata Tav¨¢rez, quien afirma que durante el ataque le llamaron "negro" e "inmigrante, hijo de puta". La r¨¢pida reacci¨®n de una mujer y de dos hombres que salieron de un coche provoc¨® la fuga de los cabezas rapadas.

A pesar de las heridas y de los consejos que le dieron las personas que le socorrieron, el agredido se empe?¨® en ir a su trabajo y solicitar ayuda para salir a la b¨²squeda del grupo. Nada m¨¢s llegar al restaurante y contar lo sucedido, cocineros y camareros, tambi¨¦n inmigrantes, se armaron e iniciaron una persecuci¨®n que no fue demasiado complicada. Tav¨¢rez, provisto de un largo cuchillo de cocina, les condujo al lugar de la agresi¨®n, donde unos j¨®venes les indicaron que los cabezas rapadas estaban en el metro de Lima. Tras bajar las escaleras y penetrar en el t¨²nel, descubrieron a los agresores. "Conseguimos capturar a tres, y aunque mi intenci¨®n era hacerles algo, no lo hice porque pens¨¦ en mis hijos y en lo que podr¨ªa pasar despu¨¦s".

Cuatro vigilantes jurados retuvieron a los tres j¨®venes en el interior de una de las taquillas del metro, hasta que lleg¨® la polic¨ªa, que traslad¨® a los tres arrestados a la comisar¨ªa de Chamart¨ªn. Jos¨¦ Antonio Tav¨¢rez asegura que varios j¨®venes intentaron tomarse la justicia por su mano y golpear a los cabezas rapadas, quienes aseguraban que el que le dio el golpe hab¨ªa escapado. Tav¨¢rez fue trasladado al hospital Ram¨®n y Cajal, donde se le apreciaron hematomas y un traumatismo facial que precis¨® 10 puntos de sutura.

Los tres j¨®venes cabezas rapadas detenidos por agredir al dominicano son Luis Alfonso H., de 15 a?os, Ignacio V. S., de 14, y Luis D. de los R., de 16. Este ¨²ltimo, mayor de edad penal, fue puesto en libertad desde la comisar¨ªa de Chamart¨ªn, tras declarar que no particip¨® en la agresi¨®n, aunque reconoci¨® que acompa?aba a sus amigos, informa Jes¨²s Duva.

Los otros dos muchachos prestaron declaraci¨®n en las dependencias del Grupo de Menores de la Polic¨ªa Judicial (Grume) en presencia de sus famil¨ªares. Era previsible que fueran puestos en libertad, bajo la custodia de sus tutores.

Casado con una espa?ola

Los tres implicados en el ataque al extranjero residen en el centro de Madrid y son amigos por ir juntos a los partidos del Real Madrid. La polic¨ªa investiga la posible relaci¨®n de los j¨®venes con el grupo de hinchas Ultrasur. Los j¨®venes han reconocido que no ten¨ªan ning¨²n motivo para golpear a Tav¨¢rez, excepto porque ¨¦ste vest¨ªa una prenda con la inscripci¨®n Rep¨²blica Dominicana.

"Ahora s¨®lo quiero", declar¨® Tav¨¢rez, "que se les d¨¦ el castigo merecido a los que me agredieron, porque lo que me ha pasado a m¨ª le puede pasar a cualquier otra persona".

Tav¨¢rez se cas¨® en Santo Domingo con una espa?ola, Julia Cachaceiro, con la que ha tenido tres hijos: Melisa, de dos a?os, que naci¨® en Espa?a, Javier, de seis a?os, y Jos¨¦ Luis, de 10. Su suegro, Julio Cachaceiro, estaba indignado porque ¨¦l emigr¨® a la Rep¨²blica Dominicana hace varios a?os, donde fue bien tratado.