Juan Pablo II pide en As¨ªs tolerancia y oraci¨®n para que la paz vuelva a Europa

El Papa destac¨® ayer la importancia de la tolerancia y la oraci¨®n para que la paz vuelva a Europa, durante la vigilia que presidi¨® en la bas¨ªlica franciscana de As¨ªs. Participaron en la jornada representantes de todo el episcopado de Europa, as¨ª como de las iglesias protestantes, de los hebreos y de los musulmanes, pero no de los ortodoxos, que son mayoritarios en Serbia. Juan Pablo II no hizo esta vez ninguna referencia al "deber de intervenci¨®n internacional" a favor de las v¨ªctimas de la guerra que hab¨ªa mencionado en dos ocasiones anteriores, la ¨²ltima el pasado mes de diciembre en la FAO.

S¨ª urgi¨®, en cambio, a una intervenci¨®n internacional en Bosnia-Herzegovina el arzobispo cat¨®lico de Sarajevo, Vinko Puljic, quien dijo: "Desde aqu¨ª, gritamos justicia. Los pol¨ªticos retrasan la soluci¨®n del problema, buscando siempre nuevos motivos para evitar una intervenci¨®n eficaz".Este tipo de actitud ante el conflicto de la ex Yugoslavia, que ha contado con el apoyo incluso activo del Papa, explica la negativa de los ortodoxos serbios a acudir ayer a As¨ªs. Sus correligionarios griegos y rusos se abstuvieron por solidaridad, de modo que el ¨²nico ortodoxo presente en los actos fue el metropolitano de Skopje, Timotej, quien se encuentra enfrentado con las otras iglesias de la ortodoxia y que, adem¨¢s, apoya la independencia de Macedonia frente a Serbia.

Juan Pablo II se abstuvo de mencionar estos problemas y la ausencia de los ortodoxos, que ha dejado en entredicho su capacidad de convocatoria en torno a un conflicto que desgarra profundamente a Europa. S¨ª advirti¨®, no obstante, que la convocatoria de ayer era muy distinta de la reuni¨®n masiva de todas las religiones celebrada en 1986 tambi¨¦n en As¨ªs, ya que aquella, dijo, fue para rezar por la paz en el Los actos de ayer tampoco lograron inicialmente una participaci¨®n destacada de p¨²blico. Durante el d¨ªa, As¨ªs se ve¨ªa casi desierta y sobre las cinco de la tarde, cuando lleg¨® en helic¨®ptero desde Roma, al Papa le esperaban menos de mil personas. Contrastaba con ese vac¨ªo una presencia masiva de la televisi¨®n.

Juan Pablo II salud¨®, de hecho, a los televidentes al iniciar el discurso que pronunci¨® durante el acto que reuni¨® a los representantes de todas las religiones. "No somos ni fuertes ni poderosos", dijo el Papa en ese acto, para explicar su, afirmaci¨®n de que, frente "a la tragedia de la guerra en Europa, en Bosnia-Herzegovina, en el C¨¢ucaso y en otros puntos de la Tierra ( ... ) no tenemos m¨¢s que el recurso a Dios".

Parroquias destrozadas

"S¨®lo en la mutua aceptaci¨®n del otro, en el consiguiente respeto mutuo, hecho m¨¢s profundo por el amor, reside el secreto de una humanidad finalmente reconciliada, de una Europa digna de su vocaci¨®n", a?adi¨® el Pont¨ªfice en la reuni¨®n que presid¨ªa, junto a destacados representantes de otras religiones como el arzobispo de York, John Habgood, el rabino David Rosen y el ulema.Este encuentro ecum¨¦nico consisti¨® en una sucesi¨®n de testimonios procedentes de las zonas del conflicto, entre otros el del citado ulema, quien dijo que, en la guerra de Bosnia, han "sido exterminados 200.000 musulmanes, heridos 500.000, encerrados en campos de concentraci¨®n m¨¢s de 100.000, violadas m¨¢s de 35.000 mujeres y m¨¢s de 650 mezquitas destruidas". El arzobispo de Sarajevo se?al¨®, por su parte, que, de 144 parroquias con m¨¢s de 150.000 fieles que ha b¨ªa en Bosnia, 62 han sido total mente destruidas. Concluido este acto, los cristianos pasaon a rezar solos en la bas¨ªlica superior de As¨ªs, mientras hebreos y musulmanes realizaban sus propios ritos en otras estancias del monasterio. "No habr¨¢ paz ( ... ) sin renunciar a las ambiciones, a la sed de poder, a la falta de respeto por los derechos del otro", dijo Juan Pablo II en esta segunda parte de la vigilia.

Todos los religiosos participantes en la jornada, que unos 3.000 j¨®venes prolongaron durante la noche en las iglesias, ayunaron desde el mediod¨ªa de